jueves, 29 de diciembre de 2016

RESEÑA (by MB) ::: LA PAREJA DE AL LADO - Shari Lapena




 
Título original: The couple next door
Autora: Shari Lapena 
Editorial: Suma de Letras
Traductor: Ana Momplet 
Páginas: 390
Fecha de publicación: 12 enero 2017
Encuadernación: rústica
Precio: 18,90 euros





Tu vecina te dijo que preferiría que no llevaras a tu bebé de seis meses a la cena. No es nada personal, simplemente no soporta sus llantos.
Tu marido estaba de acuerdo. Después de todo, vivís en la casa de al lado. Podíais llevaros el monitor infantil y turnaros para pasar a verla cada media hora.
Tu hija dormía cuando fuiste a comprobar por última vez. Sin embargo, en este momento, mientras subes corriendo las escaleras hasta su habitación envuelta en un absoluto silencio, confirmas que tu peor pesadilla se ha hecho realidad: ha desaparecido.
Nunca antes habías tenido que llamar a la policía. Ahora están en tu casa y quién sabe lo que pueden llegar a descubrir.
¿De qué serías capaz cuando has sobrepasado tus límites?

Alrededor de la medianoche, en una casa preciosa de una barrio maravilloso de Nueva York. Tras una horas agitadas, por fin Cora duerme plácidamente en su cuna; hace una media hora que su mamá, Anna, le ha dado su última toma. Cora hubiera preferido que le nutrieran con ese néctar maravilloso que siempre la tranquiliza y reconforta, pero no era el mejor momento; esta noche Anna, su mamá, tenía la cabeza intoxicada de vapores y pensamientos que le impedían reconocer las señales que le mandaba Cora. También es verdad que nuestra "bebita" últimamente no le ha puesto las cosas fáciles a su madre, pero Cora se expresa así, es su manera de hacerse entender, y si además le añadimos que en la última toma no necesitaba el artilugio que le han colocado en la boca (y que ni por asomo es parecido al calorcillo que desprende la piel de su mamá), se podría decir que esta noche es diferente, extraña, llena de incertidumbres y cargada de una electricidad negativa que tensiona a madre e hija... parece que esa comunión que las vincula esta noche no funciona como debería.

Anna, a pesar de los vapores alcohólicos que envuelven y nublinan su mente, y de los celos e inseguridades que ha sentido durante toda la noche, piensa que hoy no ha estado a la altura con Cora, que no ha cumplido las expectativas que ella misma se exige. Su hija es el mayor regalo que le ha proporcionado la vida, un ser perfecto y maravilloso. Cree que una vez llegue a su casa, todas las dudas, remordimientos y miedos que la corroen desaparecerán. Solo necesita ver a su hija, porque sabe que la decisión que ha tomado esta noche no ha sido la adecuada, pero al mismo tiempo ha sido débil al dejarse llevar por todos los que tenía a su lado...

La cena, con su patética sobremesa, por fin ha terminado. Ahora puede volver junto a su hija  y, aunque procure no despertarla, al menos se asomará al sueño de los benditos, participando así de alguna manera de su paz y tranquilidad, esa que Anna siente cada vez que observa la preciosa carita de su bebé.

Cuando Anna entra en la habitación de Cora, el bálsamo reparador se convierte en "un aire de irrealidad" (tal y como lo describe Shari Lapena) que impregna y  llena el hogar de los Conti. Descubre que Cora no está en su cuna: ha desaparecido. 

A partir de este punto, la narración nos introduce en un drama estresante que nos precipita, al igual que a nuestros protagonistas, hacia una caída a los infiernos, donde la sensación de vértigo, culpa, remordimientos y desesperanza desgarra toda la historia. Una vez que esa pátina que envuelve a los Conti de familia perfecta, feliz y maravillosa se resquebraja, ya no hay vuelta atrás, todo estalla. Solo hay una pregunta, ¿dónde está Cora? Son las únicas palabras que se repiten una y otra vez, como un repique de campanas que anuncia a nuestros protagonistas la salida de todos sus demonios... esos que estaban resguardados y sellados a buen recaudo en el fondo de sus mentes y sus almas.

La dramática situación los ha desbordado alcanzando a todos: su familia, los padres de Anna, Alice y Richard, sus amigos, vecinos, conocidos y no conocidos. La noticia se ha expandido exponencialmente, y todos preguntan: ¿dónde está Cora?

El inspector Rasbach es el único que parece ser competente y estar capacitado para direccionar y encauzar el drama que, por otro lado, ha fragmentado el hogar de los Conti. Será el director que orqueste toda la dramática historia. Shari Lapena le ha dado unas cualidades y características que lo perfilan de la templanza e inteligencia necesarias para resolver y descubrir todas las causas y motivos, así como para responder a esa misma pregunta: ¿dónde está Cora? 

El inspector Rasbach será los ojos y la mente que guiará a los lectores, enseñándonos a observar los acontecimientos con perspectiva y marcándonos los ritmos y los tiempos; así mismo, nosotros, los lectores, desde la distancia adecuada que nos ha marcado nuestro director, participaremos de toda la investigación, y conoceremos todas las posibilidades, sospechosos, pruebas y circunstancias que enmarcan nuestro drama. Y descubriremos a nuestro pesar el lado oscuro de todos los personajes; sus mezquindades, perversiones, egoísmos, engaños... tal y como se nos anticipa en la cubierta del libro, "la gente es capaz de casi cualquier cosa".

En definitiva, Shari Lapena nos ha regalado un thriller psicológico, trepidante y de alta tensión, donde el realismo de la situación, el estrés y el vértigo que soportan nuestros personajes alcanza los niveles necesarios para engancharte a su lectura, impidiéndote la desconexión de la misma. A todo ello contribuye la maestría de nuestra autora, la manera con la que ha estructurado y desarrollado la trama y, sobre todo, la profundidad de unos personajes, descarnados y fundidos, que lo dan todo. No hay duda que el resultado final es un gran libro.


Shari Lapena (Toronto, 1960) trabajó como abogada y como profesora de inglés antes de convertirse en escritora de ficción. Ha publicado dos novelas aclamadas por la crítica literaria. La pareja de al lado es su debut en el género del thriller.
Miss Bingley

miércoles, 28 de diciembre de 2016

RETO SABUESOS 2017

No somos de apuntarnos a retos, y de hecho este año solo nos hemos apuntado a dos (con los que repetiremos), pero para el año que viene me apetece mucho añadir el reto de sabuesos que organizan en No solo leo desde hace ya tres años (bases AQUÍ).


Creo que ya conocéis todos la dinámica de este reto, pero por si acaso me traigo la info que ellas proporcionan en su entrada.

Consiste en leer novelas con un detective, investigador, policía... como protagonista. No tiene por qué ser el primero, sino que puede ser cualquier novela de la saga; se pueden leer uno, varios o todos del mismo protagonista, y si solo tiene una novela publicada pero se sabe ya que la saga continuará, también es válido.

Las reseñas se deben organizar en esta entrada en relación al detective, y cuantas más reseñas, más puntos para el sorteo que realizaran al finalizar el año. La forma de organizarlas sería algo así:

Subinspector Carl Mørck
(Jussi Adler Olssen)
La mujer que arañaba las paredes
Los chicos que cayeron en la trampa

Yo voy a barrer para casa y aunque leeré y reseñaré de todo porque me encanta la temática, también quiero aprovechar para reseñar sagas de sabuesos cuyas historias están ambientadas hace unos añetes o en otras épocas. Mi intención es no ceñirme solo a sabuesos contemporáneos, pero a ver en qué queda la cosa.

¡Felices lecturas a todos!





Inspector Unai López de Ayala
(Eva García Sáenz de Urturi)
El silencio de la ciudad blanca


Inspector sir John Appleby
(Michael Innes)
Muerte en la rectoría


Detective Alex Cross
(James Patterson)
Vías cruzadas
La hora de la araña


Agatha Raisin
(M.C. Beaton)
Agatha Raisin y la quiche letal


Detective Yoshitaro Katayama
(Jirô Akagawa)
Los misterios de la gata Holmes


Phryne Fisher
(Kerry Greenwood)
Una detective inesperada
Un misterio de altos vuelos


Comisario Bordelli
(Marco Vichi)
El comisario Bordelli 


Cormoran Strike
(Robert Galbraith)
El canto del cuco


Inspector Bermejo y sargento Roncero
(Armando Rodera)
El color de la maldad
El aroma del miedo


Inspector Alan Grant
(Josephine Tey)
La hija del tiempo


Inspector Christer Wijk / Puck Bure
(Maria Lang)
La muerte te espera


Inspector Furnival
(Annie Haynes)
Asesinato en Charlton Crescent

lunes, 26 de diciembre de 2016

RESEÑA (by MH) ::: VIAJE A LONDRES (JULIO 1874) - Vitalie Rimbaud



Título original: ----- 
Autora: Vitalie Rimbaud 
Editorial: Baile del sol
Traducción: David González y Dagmar Buchholz 
Páginas: 96
Fecha en que fue escrito: 1874
Fecha esta edición: 2011
Encuadernación: rústica con solapas
Precio: 10,40 euros 
Ilustración de cubierta: Ana Cibeira
Ilustraciones interiores: VV.AA.

(Lectura válida para el MES TEMÁTICO DE LA NOVELA CLÁSICA organizado por Laky en su blogLibros que hay que leer)
 
He dormido muy mal. Decepción: nada, ninguna carta. Me asombra realmente que no llegue nada. ¡Bueno, paciencia! Ahora ya me he acostumbrado algo a este país. Me resulta más soportable. Charleville se me antoja un delicioso lugar muy lejano. Hasta me parece que lo tengo un poco olvidado. ¡Ah, no! Eso no puede ser: soy fiel a mis afectos y me daría vergüenza olvidar mi patria.

Este diario que hoy reseño es de esos libros que tienen una historia detrás y que, gracias al empeño de algunas personas, hoy en día podemos leerlo traducido y en una edición en la que han participado multitud  de artistas con sus ilustraciones. De esas historias personales de las que hoy podemos ser testigos porque otros se esforzaron en que así fuese. Y a ello hay que sumar las circunstancias de este diario, el viaje que implica, la identidad de la autora y el adentrarnos en unas páginas que jamás tuvieron intención alguna de ser leídas por unos ojos que no fuesen los suyos. Una lectura especial por muchas circunstancias.

Vitalie Rimbaud era hermana del famoso poeta francés Arthur Rimbaud. Su educación fue estrictamente religiosa en un convento, pero escribía poesía y tenía un diario donde escribía con regularidad. Uno de los acontecimientos más resaltables incluidos en ese diario fue un viaje que realizó a Londres en julio de 1874 cuando solo contaba quince años, viaje que detalló desde el mismo día en que partió hacia la ciudad inglesa. El objeto de ese viaje era visitar precisamente a su hermano Arthur, que en aquella época vivía en la capital londinense y buscaba un trabajo estable que le alejase de la precaria situación económica en la que se hallaba. Vitalie murió apenas un año y medio después, en diciembre de 1875.

Muchos años llevó al poeta David González sacar adelante este cuaderno de bitácora, como él mismo lo define al final del libro, en el que además ejerce de traductor junto a Dagmar Buchholz. En él somos testigos de 42 entradas de este diario, que no corresponden realmente al mismo número de días, pues algunas pertenecen a distintas impresiones sobre una misma jornada; breves, brevísimas, el noventa por ciento de ellas, salvo en algunas en las que Vitalie se extendía algo más de una cara, según la emoción que le transmitiese todo aquello que quería reflejar. En su mayor parte hace gala no de brevedad de palabra, sino de una narración que dista mucho de un diario normal de una adolescente. Escribe como si de una escritora misma se tratase, con reflexiones íntimas rebosantes de fragilidad y sensibilidad y expresadas de un modo poético e introspectivo.

Pero tampoco conviene equivocarse sobre esta lectura. Es lo que es: las impresiones de una joven que va a visitar a su hermano y ve Londres por primera vez, y cómo se siente allí conforme pasan los días. Supongo que el interés por traducir al castellano este diario radica sobre todo en las constantes alusiones que hace a su hermano Arthur, porque esas palabras sirven también para hacernos una idea de primera mano sobre cómo era la vida de Rimbaud en aquella época. Pero lo dicho, son entradas breves, muy concisas en algunos casos y muy escasas en número. Que nadie espere un diario pormenorizado y exhaustivo sobre aquella estancia.

Vitalie viajó acompañada de su madre, y Rimbaud ejerció de guía turístico para ellas (a tiempo completo los primeros días, y de una manera más intermitente trascurrido ese tiempo y tras tener que volver a sus ocupaciones habituales. Aun así, casi siempre acudía a desayunar con ellas y al finalizar la tarde). Vemos el bullicioso y cosmopolita Londres a través de una persona que no solo la contemplaba por primera vez, sino que estaba acostumbrada a la quietud de su pueblo y al convento en el que se había educado. Visitamos junto a ella muchos de esos monumentos que siguen siendo símbolos hoy en día, y otros cuantos que han desaparecido; nos transmite sus problemas con el lenguaje, pues ella y su madre no hablaban ni una sola palabra de inglés; acude en varias ocasiones a servicios protestantes, y ella, criada bajo un catolicismo estricto, se hace preguntas sobre esa fe que creía tan distinta a la suya pero que se descubre admirando en ciertos aspectos; disfruta paseando por la ciudad, visitando el Museo Británico, recorriendo sus jardines; no se corta a la hora de dar su opinión sobre los ingleses (¿por qué iba a hacerlo? solo iba a leerlo ella)... pero también somos testigos de los malos momentos. Echa tremendamente de menos a su hermana Isabelle, con la que no cabe duda que guardaba una estrechísima relación; no soporta el calor de la ciudad, se siente enferma en varias ocasiones; cuando ya lleva allí unos días comienza a mostrar su aburrimiento, las ganas que tiene de marcharse, lo cuesta arriba que se le hace la estancia, y da muestras de un carácter taciturno, con tendencia al hastío, al desaliento y a la melancolía; y sobre todo, demuestra un profundo afecto y respeto por su hermano, por el que sufre a causa de su incapacidad para conseguir un trabajo (o de la facultad que tiene para dejarlo pasar cuando lo obtiene), pero al que no puede dejar de alabar y admirar cada vez que lo nombra. 

El diario termina con una anotación una hora antes de partir hacia la estación, con otra anotación añadida a posteriori por su hermana Isabelle donde explica que el trayecto de vuelta fue distinto al de ida porque así lo planeó su hermano Arthur, siempre pendiente de ellas, para que pudiesen ver lugares distintos al viaje de ida. Y esto es el diario, sin más. Las anotaciones de una niña de quince años que va a visitar a su hermano a una ciudad que no conoce, solo que la forma de ver las cosas, la manera de expresarlas, el mundo interior del que da muestras a través de sus entradas, las convierten en algo especial.

La mayor parte de las 42 entradas están acompañadas de una ilustración. Yo he contado más de veinte artistas distintos, con lo que podéis imaginar que todas ellas difieren mucho entre sí y ofrecen el particular punto de vista de cada uno de ellos. Una edíción en la que se nota el trabajo, el empeño y el esfuerzo de mucha gente para que saliera adelante.

Soy consciente de que es una lectura que llamará la atención de muy poca gente; se lee en un suspiro y realmente, a nivel literario, quizás se pueda pensar que no aporta ni dice gran cosa más allá de las pinceladas que da sobre un personaje como Rimbaud. Y quizás sea así, pues como diario sabe a poco. Pero tiene algo que lo hace especial, no sabría decir qué es, aunque también tengo claro que, por sus características y peculiaridades, por mucho que a mí me haya gustado, no me atrevería a recomendar este libro a cualquier lector. 


Vitalie Rimbaud, hermana del poeta francés Arthur Rimbaud, nació en 1858 y murió a los 17 años, el 18 de diciembre de 1875, a causa de una sinovitis tuberculosa.

Está enterrada en Charleville, su lugar de nacimiento, en una tumba al lado de su hermano. En su lápida pone: "17 años. Orad por ella".
Miss Hurst