Título original: Caminaré entre las ratas
Autor: David Pérez Vega
Editorial: Carpe Noctem
Páginas: 348
Fecha de publicación: mayo 2020
Encuadernación: rústica con solapas
Precio: 22 eurosDiseño de cubierta: Carlos Primo
La muerte inesperada de un amigo de infancia sorprende a Domingo en una
encrucijada vital. A punto de cumplir cuarenta años, el protagonista de
esta novela es un teleoperador que trata de convertirse en profesor de
Economía, se refugia en el sexo por Internet y lucha contra la
frustración de ser un escritor sin lectores ni interlocutores. Durante
las últimas semanas del año habrá de hacer frente a diversos
desencuentros, mientras deambula, cada vez más angustiado, por un Madrid
inquietante, recorrido por la presencia fantasmal de un partido de
ultraderecha, por la sombra de la crisis económica y por una plaga
creciente de ratas gigantes que no parecen preocupar a nadie. En
Caminaré entre las ratas lo cotidiano y lo anecdótico sumergen al lector
en una atmósfera de rareza costumbrista. Entre el realismo, el leve
expresionismo y la crítica social, la nueva novela de David Pérez Vega
desvela una voz innovadora y original que, como toda buena novela, se
convierte al final de la partida en un espejo que devuelve al lector una
imagen siempre perturbadora: la de sí mismo.
Yo soy un tipo de casi cuarenta años, de barba canosa, que cobra 800 euros al mes, sin mujer y sin hijos que, tirado en el suelo, juega medio borracho, entre unos niños pequeños, con una figura de un pato Donald de plástico.Nuestro tipo se llama Domingo y es la voz narrativa protagonista de esta historia. En Caminaré entre las ratas se nos describe a un hombre que por lo visto no ha encontrado su sitio (ese sitio que él cree o siente que se merece en el mundo), ya sea por elecciones pasadas entre lo que debía, le convenía o verdaderamente creía. Después de haber subido y bajado por la escalera social se encuentra ante nuevos comienzos que le producen más cansancio que entusiasmo; siente que camina entre ratas, roedores gigantes que, literal y metafóricamente, a los demás no parecen importarles.
Domingo atraviesa una crisis personal, ve como su inminente llegada a los cuarenta viene acompañada de una situación laboral precaria y desencantada. A lo largo del camino ha ido perdiendo fuelle y eso es algo que no termina de comprender, pues pertenece a la generación que siguió el método universidad=trabajo estupendo, y aun así ve como muchos otros tampoco han alcanzado los resultados que pensaban que se merecían... Nos lo encontramos en un nuevo reciclaje, terminando el máster que le habilitará para ser profesor y deambulando con su ejemplar de En vida, de Haroldo Conti, el cual le encanta leer en la barra de un bar mientras saborea un café con leche. Si alguna o alguno le preguntara por casualidad qué lee, nuestro protagonista le miraría con condescendencia para contestarle que literatura hispanamericana.
Veo que delante de ella, encima de un libro de texto y un taco de redacciones con el título de Figuras literarias en la canción Hijo de la Luna, tiene una novela que yo nunca me atrevería a leer y a reseñar en mi blog, porque después de siete años de andadura literaria por internet uno ya posee una reputación que cuidar.Haroldo Conti, Antonio Di Benedetto, Roberto Bolaño, Mario Levrero, Primo Levi, Dostoyevski... esta es la literatura que nutre la mente del protagonista, referencias constantes en su trasiego vital.
Tampoco vamos a juzgar al protagonista con doblez y falsedad, pues de alguna forma y en muchas de sus facetas nos vemos reflejados. Y si algo hay que concederle es su generosidad: se abre en canal ante los lectores para opinar sobre lo público y lo privado, la política, la religión, el racismo, el sexo, la familia, la amistad... temas que convergen en su crisis existencial, en su pérdida de rumbo y en su volver a dejarse llevar por lo que le conviene más que por lo que quiere.
El autor ha escrito una obra cuidada, profunda, íntima y personal, narrada en primera persona, donde los pensamientos absorben el espacio para asumir el protagonismo. Un libro enriquecido por la literatura y su mercadeo, el costumbrismo cotidiano que retrata una polarización social indiferente al tiempo que corroe los valores naturales inherentes a las personas.
Caminaré entre las ratas está ambientada en el Madrid de 2013, cuando el país intentaba salir de otra crisis económica, y leyéndola se observa que, siete años después, su historia sigue siendo de lo más actual. En ella encontramos las mismas dicotomías económicas, sociales, políticas y existenciales que se plasman en la travesía que Domingo, el narrador-protagonista, realiza por su noche oscura, descubriéndonos en su peregrinar a un hombre lleno de claroscuros, contradicciones, pesares y quejas, que van también acompañados de honestidad, sensibilidad, emoción y sentimiento.
Esta comida de Navidad la vamos a celebrar sin José Luis, aunque está claro que su ausencia se va a sentar en nuestra mesa como un comensal más. Es posible que evitemos recordar que no está...
David Pérez Vega (Madrid, 1974) empezó a estudiar Ciencias Físicas. Cuando se le quedaron cortos los espacios de dimensiones infinitas de Hilbert, decidió cambiarse a Administración y Dirección de Empresas. Llegó a trabajar como auditor de cuentas en una conocida multinacional, pero, a pesar de la propaganda que aseguraba que la suya era la mejor empresa del mundo, pronto llegó a la conclusión de que cenar un sándwich extraído de una máquina a las doce de la noche sobre un ordenador no podía ser el éxito.
Actualmente da clases en bachiller y secundaria.
Ha publicado Los insignes (2015) con la editorial Sloper, y con Baile del Sol El hombre ajeno (2014), Acantilados de Howth (2010), Koundara (2016), y los poemarios El bar de Lee (2013) y Siempre nos quedará Casablanca (2011).
Actualmente da clases en bachiller y secundaria.
Ha publicado Los insignes (2015) con la editorial Sloper, y con Baile del Sol El hombre ajeno (2014), Acantilados de Howth (2010), Koundara (2016), y los poemarios El bar de Lee (2013) y Siempre nos quedará Casablanca (2011).
Podéis leerle también en su blog -> Desde la ciudad sin cines
¡Qué raro es veros con una novela contemporánea! Creo que me he acostumbrado demasiado a vuestros pequeños grandes clásicos. Me gusta.
ResponderEliminarBuenos días.
ResponderEliminarUn título original aquí en buestro estupendo blog. Lamentablemente, la historia que trata es más frecuente en la actualidad de lo que nos gustaría. Volver la cara a la realidad no ayuda, sin duda el autor es valiente afrontando este argumento y demuestra lo cíclica que es la vida y que hay que ser previsor porque nada te asegura la felicidad eterna.
Un abrazo y muy feliz semana!!
Qué repelús de portada! no sabes lo que odio estos bichos 😖 La historia sin embargo me atrae, y es que cuando parece que avanzamos, volvemos al punto de partida.
ResponderEliminarMe lo llevo por si acaso, que ya estoy recopilando lecturas para los meses de verano.
Besitos Miss B 💋💋💋
Hola MB la verdad es que a mí las historias intimistas no me llegan a llenar. La dejo pasar.
ResponderEliminarUn besazo
Del autor leí el de los acantilados y me gustó bastante. De este lo que no me gusta es que trae demasiado desencanto y realidad y de eso ahora andamos muy saturados. De momento lo dejo pasar. Igual para tiempos mejores.
ResponderEliminarBesos
Hola!! No creo haber leído nada del autor así que tomo nota.fiandome de tus gustos seguro lo disfruto.
ResponderEliminarGracias saludosbuhos
Hola, la verdad es que no me llama mucho, así que lo dejaré pasar. Besinos.
ResponderEliminar¡Hola! Creo que es una novela que trata un tema muy actual, algo que no me extraña teniendo en cuenta que está ambientada hace apenas 7 años. Aun así, no creo que sea un libro para mí, por lo que no me animo con él.
ResponderEliminar¡Nos leemos!
Una novela interesante, el tema que trata sin duda daría que pensar porque parece que estamos en un buble que se repite y no salimos...
ResponderEliminarPues no pinta nada mal. Lo que no me atrae nada es su portada...
ResponderEliminarBesotes!!!
No estoy muy preparada para leer este tipo de libros. Creo que me hundiría mas en mi existencia. Besos
ResponderEliminarMe gustó Acantilados de Howth aunque, por las impresiones que compartes en tu reseña, no me termina de convencer esta última novela de David Pérez Vega. Besos.
ResponderEliminarPor un lado no es un tema sobre el que ahora mismo me apetezca leer y, por otro lado, la única novela que he leído del autor no me convenció en absoluto.
ResponderEliminarBesos
Estimadas inquilinas:
ResponderEliminarMuchas gracias por vuestra lectura y el exhaustivo y completo comentario.
Un abrazo
La historia no puede ser más interesante, me la apunto que me ha picado la curiosidad.
ResponderEliminarBesotes
No estoy muy segura. Ahora busco otro tipo de lecturas pero no te diré que no cuando entre el otoño. Besos
ResponderEliminarSiento cierta predilección por los que no terminaron de encontrar su sitio y su día a día es un poco monotonía, los nostálgicos y melancólicos. Me gusta esa honestidad, esa sinceridad de la que hablas con la que el prota se abre en canal. No me importaría leerlo.
ResponderEliminarUn beso ;)
Buen diseño de portada.
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