Título original: En la Calle Mayor
Autora: Virginia Gil Rodríguez
Editorial: Autopublicación Amazon
Diseño de cubierta: Alexia Jorques
Edición: Paloma del Castillo
(Ejemplar ganado en el sorteo realizado por Laky en su blog, Libros que hay que leer, y enviado por su autora)
Cuando nos tocó este libro en un sorteo realizado por Laky en su blog, y me lo quedé yo (al ser dos en el blog nos vamos repartiendo estas cosillas), me hizo bastante ilusión porque no suelo leer este tipo de historias, y me apetecía muchísimo introducirme en este género (para leer lo de costumbre siempre estoy a tiempo). Cuando digo "este tipo de historias" me refiero al género en que se encuadra la novela, el llamado realismo mágico. No es el tipo de libro que yo suela leer, y reconozco que a mí la literatura con cierto tono espiritual o angelical no me llama mucho (y de los de autoayuda y desarrollo personal huyo como alma que lleva el diablo, lo siento), pero eso no me ha impedido disfrutarlo y me alegro enormemente de haber tenido la oportunidad de hacerlo. Me imaginaba un chute de cosas bonitas, de magia, un poso de optimismo y buenos sentimientos, y es ni más ni menos que lo que ofrece esta historia, pero de un modo que te hace sentirlo posible. Sí, suceden cosas mágicas, inexplicables o inverosímiles, pero también ocurren muchas otras que se derivan de ellas que no necesitan de magia y sí de mucho amor, empatía, buena fe y cariño. Y eso tenemos que ponerlo nosotros y no depender de ángeles que nos ayuden. Existan o no, que eso ya es otro tema.
Creo que cuando una persona escribe desde el corazón se nota en su forma de expresar las ideas, de plantear las situaciones que ocurren en la historia y sobre todo en los personajes. Y a Virginia Gil se le nota mucho que esta historia le nace del alma. Y te lo transmite. Te emociona en algunos momentos por la sencillez con la que plasma sentimientos a los que todos nos hemos enfrentado alguna vez en la vida. No hace falta decir las cosas de un modo grandilocuente ni haciendo alarde de enrevesada prosa para irradiar sensibilidad, y por eso la naturalidad de Virginia escribiendo te llega más todavía.
May, esa niña que habla poco pero siente y guarda mucho, somos todos nosotros en algún momento de nuestra vida. Esos libros en los que busca consuelo, ese amor por la literatura y las historias que encierra, esa magia que nace con la lectura de un libro, creo que nos puede definir a muchos bibliófilos que pululamos por estos blogs internáuticos. Ella cree en ese libro, en lo que promete, y las cosas comienzan a suceder a su alrededor. La magia que encierra la vida comienza a hacer de las suyas, y aunque May duda en ocasiones si todo lo que ocurre es consecuencia de lo que promete el libro o no, si los ángeles existen o no, la autora no te deja dudar en ese aspecto: existen, y yo, que como digo no soy mucho de estas cosas, comulgo con ello y acabo el libro sonriendo y alegrándome por May, por la señora Mel y el señor Pol, por Ana y esas barreras derribadas...
El libro está narrado con frases cortas, totalmente descriptivas y en presente (no es fácil escribir en presente toda una historia, y Virginia sale muy airosa). Hay mucha abundancia de diálogos, y cada personaje está muy definido. Son pocas páginas, y no hay espacio para desarrollo, pero con unas pocas líneas enseguida te haces una idea general de la personalidad de cada vecino de esa pintoresca y preciosa calle Mayor (que es la calle Mayor de Hondarribia, que creo que no lo he comentado anteriormente). Por cierto, me he reído muchísimo con Leo, porque conozco a un niño exactamente igual de agotador y que a un tiempo te hace reír con cada una de sus ocurrencias. Y he adorado a May con cada página que pasaba.
En la sinopsis se dice que gustará a quien le guste Michael Ende, y eso me llamó mucho la atención porque de pequeña era mi escritor de cabecera. aunque luego haya tirado por otros derroteros en cuestión de gustos. Una vez leído tengo que decir que entiendo a qué se refiere con esa alusión, pero también hay que ser conscientes de que no tienen nada que ver en el trasfondo narrativo. Sí que se asemejan en que esta novela la pueden leer tanto adultos como niños, y que según la edad que se tenga se extraerán cosas totalmente diferentes de ella. Me encantaría leer la reseña de este libro escrita por un niño de unos 10 o 12 años para saber qué es lo que ve y entiende en esta historia.
Se lee en un suspiro, es muy sencilla, desborda sensibilidad, y a un tiempo encierra muchas cosas que no son tan evidentes a primera vista. No estaría de más intentar aplicarlas en nuestro día a día para comprobar si realmente existe o no la magia. Nunca se sabe.
**Por cierto, yo lo tengo en papel porque me lo envió la autora tras ganar el sorteo, pero en Amazon solo me aparece en kindle. No sé si es que ha dejado de estar disponible en formato papel.
Editorial: Autopublicación Amazon
Páginas: 126
Fecha publicación: enero de 2016
Encuadernación: rústica
Precio: 2,99 (kindle)Diseño de cubierta: Alexia Jorques
Edición: Paloma del Castillo
(Ejemplar ganado en el sorteo realizado por Laky en su blog, Libros que hay que leer, y enviado por su autora)
¿Puede un libro cambiar vidas y ayudar a ser feliz? ¿Se trata realmente de un libro? ¿O es un mago? ¿O incluso un ángel? ¿Y si fuera en realidad uno mismo? En la Calle Mayor, una novela de realismo mágico sobre la chispa de luz que todos llevamos dentro. En la Calle Mayor, un libro de crecimiento personal para tres edades, de 10 a 100 años. Dicen que En la Calle Mayor, puede gustar a los fans de Michael Ende.
En la Calle Mayor de una ciudad amurallada sucederán hechos sorprendentes. May ve como su padre, un escritor frustrado, desaparece ante sus propios ojos en circunstancias misteriosas. Desde ese momento su vida cambia. Su madre, con la que la relación es silenciosa, aumenta las horas de trabajo en el hospital, y ella tiene que ocuparse de Leo, su hermano pequeño. May deja de hablar con todo el mundo salvo con Leo. Poco a poco olvida las horas compartidas de lectura en las rodillas de su padre, y empieza a comunicarse con él a través de su diario, sin obtener respuesta explícita. Una tarde, su madre descubre un libro en el escaparate de la librería de la Calle Mayor, y una fuerza desconocida le invita a adentrarse en la tienda. El libro habla de ángeles, de la magia de la vida. El libro es una invitación a utilizar esa magia para transformarse. Pero no todo ocurrirá de la manera esperada. Porque la vida nos tiene reservado exactamente lo que necesitamos y no lo que creemos necesitar. O eso es al menos lo que dicen el zapatero y la librera, los dos sabios espirituales de la Calle Mayor.
Cuando nos tocó este libro en un sorteo realizado por Laky en su blog, y me lo quedé yo (al ser dos en el blog nos vamos repartiendo estas cosillas), me hizo bastante ilusión porque no suelo leer este tipo de historias, y me apetecía muchísimo introducirme en este género (para leer lo de costumbre siempre estoy a tiempo). Cuando digo "este tipo de historias" me refiero al género en que se encuadra la novela, el llamado realismo mágico. No es el tipo de libro que yo suela leer, y reconozco que a mí la literatura con cierto tono espiritual o angelical no me llama mucho (y de los de autoayuda y desarrollo personal huyo como alma que lleva el diablo, lo siento), pero eso no me ha impedido disfrutarlo y me alegro enormemente de haber tenido la oportunidad de hacerlo. Me imaginaba un chute de cosas bonitas, de magia, un poso de optimismo y buenos sentimientos, y es ni más ni menos que lo que ofrece esta historia, pero de un modo que te hace sentirlo posible. Sí, suceden cosas mágicas, inexplicables o inverosímiles, pero también ocurren muchas otras que se derivan de ellas que no necesitan de magia y sí de mucho amor, empatía, buena fe y cariño. Y eso tenemos que ponerlo nosotros y no depender de ángeles que nos ayuden. Existan o no, que eso ya es otro tema.
Creo que cuando una persona escribe desde el corazón se nota en su forma de expresar las ideas, de plantear las situaciones que ocurren en la historia y sobre todo en los personajes. Y a Virginia Gil se le nota mucho que esta historia le nace del alma. Y te lo transmite. Te emociona en algunos momentos por la sencillez con la que plasma sentimientos a los que todos nos hemos enfrentado alguna vez en la vida. No hace falta decir las cosas de un modo grandilocuente ni haciendo alarde de enrevesada prosa para irradiar sensibilidad, y por eso la naturalidad de Virginia escribiendo te llega más todavía.
May, esa niña que habla poco pero siente y guarda mucho, somos todos nosotros en algún momento de nuestra vida. Esos libros en los que busca consuelo, ese amor por la literatura y las historias que encierra, esa magia que nace con la lectura de un libro, creo que nos puede definir a muchos bibliófilos que pululamos por estos blogs internáuticos. Ella cree en ese libro, en lo que promete, y las cosas comienzan a suceder a su alrededor. La magia que encierra la vida comienza a hacer de las suyas, y aunque May duda en ocasiones si todo lo que ocurre es consecuencia de lo que promete el libro o no, si los ángeles existen o no, la autora no te deja dudar en ese aspecto: existen, y yo, que como digo no soy mucho de estas cosas, comulgo con ello y acabo el libro sonriendo y alegrándome por May, por la señora Mel y el señor Pol, por Ana y esas barreras derribadas...
El libro está narrado con frases cortas, totalmente descriptivas y en presente (no es fácil escribir en presente toda una historia, y Virginia sale muy airosa). Hay mucha abundancia de diálogos, y cada personaje está muy definido. Son pocas páginas, y no hay espacio para desarrollo, pero con unas pocas líneas enseguida te haces una idea general de la personalidad de cada vecino de esa pintoresca y preciosa calle Mayor (que es la calle Mayor de Hondarribia, que creo que no lo he comentado anteriormente). Por cierto, me he reído muchísimo con Leo, porque conozco a un niño exactamente igual de agotador y que a un tiempo te hace reír con cada una de sus ocurrencias. Y he adorado a May con cada página que pasaba.
En la sinopsis se dice que gustará a quien le guste Michael Ende, y eso me llamó mucho la atención porque de pequeña era mi escritor de cabecera. aunque luego haya tirado por otros derroteros en cuestión de gustos. Una vez leído tengo que decir que entiendo a qué se refiere con esa alusión, pero también hay que ser conscientes de que no tienen nada que ver en el trasfondo narrativo. Sí que se asemejan en que esta novela la pueden leer tanto adultos como niños, y que según la edad que se tenga se extraerán cosas totalmente diferentes de ella. Me encantaría leer la reseña de este libro escrita por un niño de unos 10 o 12 años para saber qué es lo que ve y entiende en esta historia.
Se lee en un suspiro, es muy sencilla, desborda sensibilidad, y a un tiempo encierra muchas cosas que no son tan evidentes a primera vista. No estaría de más intentar aplicarlas en nuestro día a día para comprobar si realmente existe o no la magia. Nunca se sabe.
**Por cierto, yo lo tengo en papel porque me lo envió la autora tras ganar el sorteo, pero en Amazon solo me aparece en kindle. No sé si es que ha dejado de estar disponible en formato papel.
Probablemente nací llena de palabras. He tardado casi 40 años en mostrarlas. Escribo desde que tengo uso de razón, pero creo que fueron unos pequeños ángeles los que irrumpieron en mi vida para trastocarla por completo y darle un verdadero sentido. En proceso de cambio continuo, pero con las palabras y la ilusión como compañeras. En la Calle Mayor es mi primer libro juvenil de fantasía.
Si quieres estar al tanto de lo que voy escribiendo, puedes hacerlo en: www.virginiagilrodriguez.com. Si además eres mamá tal vez te interese mi blog www.mamaespiritualcreativa.com, sobre temas de desarrollo personal y espiritualidad.
Si quieres estar al tanto de lo que voy escribiendo, puedes hacerlo en: www.virginiagilrodriguez.com. Si además eres mamá tal vez te interese mi blog www.mamaespiritualcreativa.com, sobre temas de desarrollo personal y espiritualidad.
Miss Hurst
Paso por encima que la estoy leyendo ahora, me está gustando. Un beso ;)
ResponderEliminarPues estaré pendiente de la reseña en tu blog a ver si lo terminas con la misma buena impresión.
Eliminar¡Besote!
Una lectura muy agradable. Muy de acuerdo con tus impresiones. Besos.
ResponderEliminarAgradable, bonita y que te deja un poso de armonía, por así decirlo. Me alegro muchísimo de que coincidamos en impresiones.
Eliminar¡Besote!
Qué preciosidad de reseña...mil gracias. Encantada de haber podido llegarte así. Un abrazo, Vir
ResponderEliminarMuchísimas gracias a ti por el libro y la historia. La he disfrutado muchísimo. Un besote grande :*
EliminarHola, guapas. He pasado por encima porque justo estoy preparando su reseña, que la publicaré el mes que viene. Es una lectura que me ha atrapado y no me ha soltado, magnífica. :)
ResponderEliminar¿Verdad que sí? Pues estaré pendiente de tu reseña entonces, que creo que coincidiremos mucho.
Eliminar¡Besote!
Siempre que leo "realismo mágico" pienso en el realismo mágico por excelencia: "La casa de los espíritus", de Isabel Allende y "Cien años de soledad" de Gabriel García Márquez, dos estilos distintos pero pureza en realismo mágico. Y si me sacas de estos dos títulos, mi romance con ese género se viene abajo. Pero leo tu reseña y me quedo con dos cosas: la sensibilidad de la autora y lo bien que sabe trasmitirla y la demostración de que la magia existe en nuestra vida cotidiana. Y de estas dos cosas sí que soy muy fan. Yo sí creo en la magia, la magia está en los detalles de nuestra rutina, el problema es que a diario vamos con demasiada prisa como para pararnos a descubrirla. Bss
ResponderEliminar"La casa de los espíritus" lo leí hace tantos años que ni recuerdo exactamente bien de qué iba. Y eso que también vi la peli... Es un género que lo tengo muy abandonado, la verdad. Quédate con la sensibilidad de Virginia, que es totalmente real, y la facilidad y sencillez con que la transmite, porque también es totalmente real. Para la magia soy muy descreída, pero también reconozco que "prisa" es mi segundo nombre. Lo dicho, tendría que aplicarme muchas cosas del libro a ver qué pasa.
Eliminar¡Besote!
Magnífica reseña. El realismo mágico es un género que me gusta, aunque no haya leído muchos libros que se encuadren en el mismo. Sin embargo esta novela no termina de llamarne de todo, no descarto leerla, pero no en estos momentos. Un saludo!
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Alejandra :) Si te gusta el realismo mágico, y en algún momento te cruzas con la oportunidad de leerla, no la desaproveches que yo creo que te gustará.
Eliminar¡Besote!
Es de esos libros que sustituyen a una sesión de spa o una buena siesta. En cierto modo alivian. Son lecturas tranquilas y de vez en cuando vienen bien.
ResponderEliminarYo tampoco comulgo con la autoayuda.
Besos
Tienes toda la razón. Alivian, te dejan reposar el alma y te sosiegan... Y te dejan con la sonrisa en la boca, que es la señal más clara de esa tranquilidad que transmiten.
Eliminar¡Besote!
Una reseña fantástica, que desde luego invita a leer este libro.
ResponderEliminarBesotes!!!
¡Muchas gracias, Margari! Si te animas finalmente a leerla espero que la disfrutes y te llegue tanto como a mí.
Eliminar¡Besote!
Has bordado la reseña, es preciosa. Y no puedo estar más de acuerdo contigo
ResponderEliminarUn beso
Ains, muchísimas gracias, Laky. Las lecturas que te llegan hacen que las palabras salgan fáciles, y esta lectura es que es muy bonita.
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Una reseña muy bonita. A mi me encantó la historia, como decís derrocha sensibilidad.
ResponderEliminarBesos
Muchas gracias, Mª Ángeles :) Veo entonces que la hemos disfrutado del mismo modo. Esa sensibilidad que derrocha no es fácil encontrarla hoy en día en un libro.
Eliminar¡Besote!
Hola Inquilinas!!
ResponderEliminarYo también gané un ejemplar gracias a Laky y fue una lectura deliciosa!! Un libro que parece un cuento pero que encierra grandes reflexiones para la vida diaria (psicología positiva, reestructuracion cognitiva, programación neurolinguistica...)
Os veo mucho por otros blogs... Me quedo por aquí!! Un placer!!
;)
¿Verdad que es una lectura preciosa? Y con mucho más en la retaguardia de lo que parece :)
EliminarHan cambiado lo del GFC y lleva todo el día dándome error al intentar seguirte en tu blog. Seguiré intentándolo. Un placer que te quedes por aquí :)
¡Besote!