Título original: In a Lonely Place
Autora: Dorothy B. Hughes
Editorial: Gatopardo
Traducción: Ramón de España
Páginas: 264
Fecha publicación original: 1947
Fecha esta edición: noviembre 2019
Encuadernación: rústica con solapas
Precio: 20,90 eurosEncuadernación: rústica con solapas
Imagen de la cubierta: Humphrey Bogart y Gloria Grahame, In a Lonely Place (1950)
Los Ángeles de finales de los años cuarenta es una ciudad de
promesas y prosperidad, excepto para el piloto de aviones de combate dix
Steele, que vive su vida como un oasis de tedio en comparación con «la
sensación de poder, euforia y libertad que le produce surcar los cielos
en solitario». Steele pasa las noches merodeando entre paradas de
autobuses vacías, playas en penumbra y cines cerrados, en busca de
mujeres jóvenes y solitarias. Apenas tiene dinero y no ve ninguna salida
a sus frustraciones. ¿Dónde está el sueño americano? Su vida da un giro
inesperado cuando se encuentra con su viejo compañero del ejército,
brub, que trabaja para la policía de los Ángeles y que va tras la pista
de un estrangulador de mujeres que lleva meses sembrando el terror en la
ciudad.
Este año me ha dado por leer las novelas en las que se basaron algunas de mis películas clásicas favoritas, y ahora le ha tocado el turno a En un lugar solitario, publicada en 1947 y cuya adaptación cinematográfica vio la luz apenas tres años después protagonizada por Humphrey Bogart y Gloria Grahame.
Al comienzo de la historia (y durante toda la novela, en realidad) acompañamos a Dix Steele, del que pronto sabemos que ha participado en la Segunda Guerra Mundial como piloto, que ahora vive en Los Ángeles, y que echa de menos la sensación de poder y libertad que le daba volar, sensación que solo recupera en parte cuando está cerca del océano. También descubrimos que le gusta acechar a chicas jóvenes, asustarlas, sentir como aceleran sus pasos cuando oyen que camina detrás de ellas... Esa misma noche recuerda que Brub, su mejor amigo durante la guerra, vive por allí cerca. Lo llama, se acerca a hacerle una visita y ahora es él quien descubre dos cosas: la primera, que Brub se ha casado con Sylvia, una elegante y enigmática mujer que desde el principio parece desconfiar de él; la segunda, que ahora Brub es inspector de policía, y que está investigando el caso de un estrangulador de mujeres sobre el que no tiene ninguna pista a pesar de que lleva actuando meses por la zona. Dix recupera su amistad con Brub un poco a regañadientes al principio, pero con mucho más interés conforme pasa el tiempo y el asesino sigue haciendo de las suyas...
Hace poco os hablé de Laura, de la autora Vera Caspary, y que fue publicada tres años antes que En un lugar solitario. Aun gustándome mucho Laura, aun creyendo que fue Caspary la escritora que despejó el camino de la novela negra para las autoras de la época y la que libró de corsés unidimensionales y restrictivos a los personajes femeninos del género, resulta imposible no ver que En un lugar solitario está muy por encima en cuanto a calidad narrativa y literaria y que es mucho más ambiciosa que su predecesora. Hughes acoge a Dix Steele como su personaje estrella, y su forma de contarnos sus procesos mentales, el modo escurridizo en que funciona su psique y el matiz con que procesa el mundo que lo rodea exige de un estilo narrativo punzante y muy inteligente que ahonde y escarbe en recovecos que dicen tanto como ocultan... porque a pesar de no estar narrado en primera persona, la narración está metida dentro de la cabeza de Dix, y es como si Dix lo supiera y actuase y pensase en consecuencia, como si fuese un actor realizando el gran papel de su vida y cuyo único público fuese el lector. Por eso nos dice muchas cosas, pero cree que nos engaña en otras... y no, no lo hace. Simplemente tú, como lector, esperas, y esperas, a que baje la guardia y muestre a la persona detrás del personaje.
En realidad son cuatro los personajes alrededor de los cuales gira la trama, una trama en la que los asesinatos son el leitmotiv que hace avanzar la historia pero que objetivamente son menos importantes que la naturaleza y personalidad del protagonista principal. Así tenemos al propio Dix Steele, aspirante a escritor, solitario, extraño, enigmático, que vive en el apartamento que ha realquilado a un antiguo compañero de universidad en Princeton y que subsiste con los 250 dólares que le paga mensualmente un tío suyo (a cambio de una carta semanal suya); Brub Nicolai, un buen hombre que a pesar de ser de buena familia prefiere dedicarse a su vocación de policía y que acoge el regreso a su vida de Dix con los brazos abiertos; Sylvia Nicolai, esposa de Brub que observa el mundo con mirada inquisitiva e inteligencia callada y paciente; y Laurel Gray, de la que no os he hablado hasta ahora porque resultará determinante en el devenir de la novela y prefiero que la conozcáis si os acercáis a ella, pero es sin duda un personaje femenino que sabe muy bien lo que quiere y lo que no quiere y actúa en consecuencia.
Quizás añadiría un quinto personaje, la propia ciudad de Los Ángeles, con sus playas, sus calles y avenidas, autocines, clubes, restaurantes de lujo y restaurantes de diario, sus bloques de pisos llenos de gente que no se cruza jamás en sus instalaciones, sus paseos en coche hasta Santa Mónica o Malibú, sus aspirantes a escritores y actrices, su carisma como refugio para gente perdida y como sueño de gente ambiciosa... Las páginas recorren de arriba abajo una ciudad que a finales de los años 40, en plena convalecencia de la Segunda Guerra Mundial, era un hervidero de personajes de todo tipo y respiraba con personalidad propia. Not my cup of tea, ciertamente, jamás he sentido el menor interés por esta parte de la geografía norteamericana (ni por el 99% de las ciudades norteamericanas, ya que estamos), pero Los Ángeles vibra a lo largo de toda la historia reclamando su importancia como escenario ideal de lo que ocurre en ella. Cuesta imaginar En un lugar solitario ambientada en cualquier otra parte.
Y ahora viene la cuestión para aquellos que hayáis visto la adaptación cinematográfica... ¿se parece al libro? No, nada en absoluto. ¿Es fiel al libro? No, nada en absoluto, y de hecho el personaje principal, Dix Steele, tiene una personalidad totalmente diferente a la literaria. ¿Cuenta al menos la misma historia que en el libro? En algunas cosas básicamente sí, pero en su mayor parte no. En resumen, una película maravillosa, pero salvo en los nombres de varios personajes, no se parece absolutamente nada ni en la historia, ni en el carácter de los personajes, ni en el tono, ni en el contexto... Parafraseando una frase que se dice mucho en la película, it doesn't stay to the book. Geniales cada uno por separado, pero completamente diferentes si se comparan.
En un lugar solitario es una lectura imprescindible para los habituales de la novela noir clásica que gusten del trasfondo psicológico y de la profundización en los personajes más que de un ritmo físico o acelerado. El estilo y enfoque de su autora, el trabajo que hace con el personaje principal, su modo de plantear las cosas y la estructura que escogió para contarlas, me han parecido simplemente fantásticos. Me he esforzado mucho por no decir más de la cuenta, y eso hace que me resulte imposible entrar en pasajes, comportamientos, diálogos y desarrollo de escenas que bien merecen que la atención recaiga sobre ellos. Y me he esforzado precisamente porque al ser completamente diferentes el libro y la película, quien haya visto la adaptación creerá que ya sabe lo que va a pasar en la novela... y bueno, no, lo sabe. No sabe nada de nada. Y así debe ser.
Por
cierto, y para terminar, si os preguntáis de donde viene el título, forma parte de un
fragmento que aparece bien avanzada la novela y que describe el
desasosiego mental del protagonista:
Se quedó ahí un buen rato, perdido en un mundo de brumas envolventes y rompientes olas, un mundo en el que no había nada más que eso y su dolor y el lamento de la sirena antiniebla mar adentro. Perdido en un lugar solitario. Y con el cerebro estrujado por nudos rojos.
Dorothy B. Hughes (1904-1993) nació en Kansas, Misuri. Hizo la carrera de periodismo. En 1931, publicó su libro de poemas Dark Certainty. Al siguiente año se casó, y no volvería a publicar hasta 1940, con la novela negra The So Blue Marble. Entre 1940 y 1952 publicó doce novelas, entre las que cabe destacar The Cross-Eyed Bear y Persecución en la noche. Durante cuatro décadas trabajó como crítica de literatura policíaca para The Albuquerque Tribune. En 1963 apareció The Expendable Man,
su última novela. Más tarde diría que su vida familiar le impidió
tener la tranquilidad necesaria para dedicarse plenamente a la
literatura. En 1978 fue reconocida como Grand Master por la asociación
Mystery Writers of America.
Hola guapísima, pues me estoy imaginando por dónde van los derroteros de la diferencia entre la trama de la peli y del libro, que igual me equivoco, eh?, pero por imaginar que no quede, jeje...
ResponderEliminarTiene buena pinta y la tendré en cuenta.
Un besazo
Uy, este lo tengo en la lista de pendientes. A ver si le hago hueco pronto :-)
ResponderEliminarUn beso y feliz semana.
Hola, pasa muchas veces que una película basada en una novela se parece en el nombre de los personajes y poco más, eso no quita para que ambas sean maravillosas. No recuerdo la película y desde luego no he leído la novela, así que me apunto ambas
ResponderEliminarBesos.
Buenas tardes, MH.
ResponderEliminarYa tenía mucha curiosidad puesta en esta novela y, ahora, gracias a tu reseña mucha más. La película me encantó y estoy segura que disfrutaré un montón buscando las diferencias entre texto original y adaptación. Ya te contaré cuando la lea. Qué gustazo descubrir autoras nuevas.
Un abrazo y muy feliz inicio de semana!!
Conocía la peli pero no sabía que estaba basada en un libro. Tomo muy buena nota, que pinta muy interesante.
ResponderEliminarNo me la pierdo. No hace mucho apunté Laura de la que he visto la película varias veces, pero no conocía el libro. En un lugar solitario creo que la vi de adolescente, cuando aún la tele hacía ciclos de cine clásico por actores o directores, pero no la recuerdo concretamente.
ResponderEliminarSiempre he dicho que un libro y una película «basada» en él pueden ser dos obras maestras aunque se parezcan poco.
Un beso.
Yo otra vez. Ya tengo plan para esta noche porque no he visto esa peli. Es curioso porque como género de cine me chiflan estas pelis pero no he leído casi ninguna novela. Esas cosas raras de la vida. Si me gusta la peli me apunto la novela porque el estilo promete.
ResponderEliminarBesos
Me sonaba la peli pero no tenía ni idea del libro. Apuntado que me lo llevo. Besos
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