jueves, 31 de octubre de 2019

RESEÑA HALLOWEEN #4 (by MH) ::: LA LEYENDA DE SLEEPY HOLLOW - Washington Irving





Título original: The legend of Sleepy Hollow
Autor: Washington Irving 
Editorial: Alba
Traducción: Guillermo Lorenzo
Páginas: 88
Fecha publicación original: 1820
Fecha esta edición: junio 2010
Encuadernación: cartoné
Precio: 18 euros
Ilustración de cubierta e interiores: Arthur Rackham


Ichabod Crane, un tipo flaco pero glotón, buen bailarín, con ciertas ambiciones mundanas, es el maestro de la comunidad de Tarrytown, en Sleepy Hollow (literalmente «Hondonada del Sueño»), un valle a orillas del Hudson. Su antagonista es Bran Bones, un grandullón grosero, que es también su rival en el amor de Katrina Van Tassel, hija única de un acaudalado terrateniente. Ichabod cree alcanzar la gloria el día en que Van Tassel le invita a una fiesta en su «castillo»... pero lo que no sabe es que lo que ahí le espera es la condenación. Pues en los bosques encantados de la «región del sopor» vaga el espectro del Jinete Sin Cabeza, «un soldado de caballería de Hesse decapitado por una bala de cañón en alguna batalla sin nombre de la Guerra de la Independencia», e Ichabold tendrá un encuentro con él que cambiará su destino.

Llena de humor y cordialidad, La leyenda de Sleepy Hollow (1819-1820) es un delicioso relato que no tardó en convertirse en parte del folklore norteamericano y en una pieza de referencia de toda la literatura fantástica. Las clásicas ilustraciones de Arthur Rackham que acompañan esta edición evocan genialmente su encanto, misterio e ironía y fueron en buena parte la inspiración visual para la adaptación cinematográfica que hizo Tim Burton en 1999.

Nada, que esto ha sido visto y no visto. Tanto tiempo anticipando estas lecturas (yo, claro, a vosotros os da igual, como es normal... xD) y llegamos al final de traca: cuatro reseñas en cuatro días de clásicos para estas fechas. He dejado para el final la que sin duda es la más conocida de todas las lecturas que os traigo esta semana de Halloween, no sé si por el relato en sí mismo o por la película de Tim Burton, pero bueno, sea como sea, probablemente sea la única que sonará a todo el mundo en general. 

La leyenda de Sleepy Hollow, de Washington Irving, es todo un clásico para estas fechas, lo veréis aparecer en cualquier lista donde se recomienden lecturas temáticas (esas listas de las que yo huyo todo lo que puedo para traeros cosas que no salen en ellas), forma parte casi intrínseca de esta celebración... pero ¿y si os digo que es la que menos inquietante me ha parecido de todas? Ya está aquí MH dando la nota :) Pues sí. Y no me malinterpretéis, este relato me parece (es) una maravilla, una cosa no quita la otra, pero Irving no engaña en ningún momento, y la historia en sí se ve venir tan de lejos desde el principio que sinceramente creo que una historia simpática y algo guasona ha derivado por obra y gracia del cine en algo mucho más tenebroso y tétrico cuando se piensa en ella, una oscuridad que no está presente en la obra original.

Irving nos traslada a Tarrytown, una región portuaria donde existe un paraje retirado, tranquilo y silencioso llamado Sleepy Hollow. Estas tierras, moradas por descendientes de los antiguos pobladores holandeses, parecen estar dominadas por una especie de influjo que hace que sus habitantes sean proclives a creer en hechos raros, sucesos sobrenaturales y leyendas tenebrosas, como la del jinete sin cabeza, el fantasma de un antiguo soldado hessiano que de vez en cuando cabalga por el valle. A este lugar llega Ichabod Crane, larguirucho, flacucho y decidido a ejercer de maestro entre los niños de los alrededores. Ichabod no tiene casa propia, va rotando entre las casas de los padres de sus alumnos, y aunque se apaña, tiene aspiraciones a una buena mesa, una buena casa y, en resumidas cuentas, a vivir cómodamente y bien. Se fija en Katrina van Tassel, hija única de un rico hacendado holandés que además de hermosa recibirá una cuantiosa herencia, así que se propone cortejarla mientras sueña con mesas repletas de platos llenos de comida. Pero tiene un rival en los afectos de la pizpireta Katrina, Abraham van Brunt, un muchachote que no se toma nada bien las atenciones de Ichabod y hará lo que tenga que hacer para que se haga a un lado y deje de aspirar a la mano de Katrina.

Esta es la historia que narra La leyenda de Sleepy Hollow durante el 95% de sus páginas, y sinceramente pienso que la intención de Washington Irving al escribirla fue la de darle un giro de tuerca a la narrativa gótica que tan de moda estaba desde hacía unos años, y contar en clave divertida y mordaz una historia de fantasmas. Por eso sigue algunas de las pautas del género: descripciones exhuberantes, profusas y exhaustivas que ocupan páginas enteras sin descanso; leyendas populares protagonizadas por fenómenos sobrenaturales; paisajes y entornos que, sobre todo por la noche, se tornan tenebrosos e invitan a dejar volar la imaginación y el miedo... todo esto lo tenemos, pero Irving no parece tomárselo muy en serio durante la historia. Su personaje principal, Ichabod Crane, está rodeado de cierta aura simpática, descarada y fresca, y su rival, van Brunt, es el típico brutote que se ve venir de lejos durante toda la historia. Cuando llega ese 5% restante, el de la aparición del jinete sin cabeza, el lector ya sabe lo que hay (o debería saberlo, que no será por falta de pistas), y aun así la narración de esa escena de persecución es simplemente fantástica... pero no es un relato de terror. No dejéis que nadie os diga lo contrario, que luego vienen las decepciones. Y poco más puedo decir si no quiero irme mucho de la lengua.

En definitiva, La leyenda de Sleepy Hollow es un relato que por méritos prop¡os (porque bien lo merece) forma parte del folclore y cultura americanos. Pero quien tenga en mente la adaptación cinematográfica y no haya leído el relato se sorprendería de lo que realmente ofrece esta historia: Washington Irving sin duda estaba más interesado en la faceta irónica y divertida de la historia y su personaje principal, en las simplemente maravillosas descripciones y en la calidad literaria de su narración que en dar miedo al lector, podéis estar seguros de eso. 

Mi intención era hacer reseña combo y traeros también la peli de Tim Burton, pero mi elasticidad del tiempo tiene un límite y he llegado hasta donde he llegado. La vi hace tanto tiempo que no me atrevo a hacer reseña sin volver a visionarla, pero sí os digo desde ya que Tim Burton sacó oro puro gótico, terrorífico y oscuro de donde había un oro completamente distinto, un oro narrativo, profusamente descriptivo, irónico y burlón. Esto último es, ni más ni menos, que el relato original literario de la leyenda de Sleepy Hollow. Y es una gozada leerlo. Una auténtica gozada.

Por cierto, esta edición de Alba es simplemente preciosa. Alterna ilustraciones a color de estilo más clásico con otras en negro más afiladas y góticas. Está ya agotada, pero la reeditaron cambiando la cubierta y manteniendo el interior ilustrado y el cartoné exterior. Sé que hay otras ediciones pero no cambio estas por ninguna :)


Washington Irving nació en Nueva York en 1783, hijo de un comerciante escocés. Estudió Derecho y empezó muy pronto a colaborar en distintos periódicos con artículos satíricos sobre la sociedad neoyorquina. Entre 1804 y 1808 viajó por Europa por razones de salud y, a su regreso, publicó una colección de sus artículos, Salgamundi (1808). En 1809, con el pseudónimo de Diedrich Knickerbocker, presunto historiador holandés, que mantendría mucho tiempo y que llegaría a convertirse en símbolo de los antiguos habitantes de la ciudad, publicó History of New York. Gracias al éxito de esta obra y coincidiendo con la quiebra de la empresa familiar, pudo dedicarse profesionalmente a la literatura. En 1819-1820 apareció The Sketch Book of Geoffrey Crayon, Gent., donde se incluían dos de sus más famosos relatos, «Rip Van Winkle» y «La leyenda de Sleepy Hollow». Nombrado agregado de la embajada de Estados Unidos (luego embajador) en España, compuso aquí sus célebres Cuentos de la Alhambra (1826), clásico ejemplo de la vertiente exótica de la literatura romántica; fue también secretario de embajada en Londres.

En sus últimos años se dedicaría a escribir biografías de grandes personalidades como Oliver Goldsmith, Mahoma y George Washington. Murió en 1859 en Sunnyside, la finca familiar a orillas del Hudson.

18 comentarios:

  1. ¡Qué ilustraciones tan bonitas!
    Yo no soy objetiva con este libro, pues son muy fan de Washington Irving. Es cierto que inquietar no inquieta tanto como otras novelas del género, ¿pero escribía tan bien este hombre!
    Os quiero agradecer el maratón de reseñas terroríficas, con o sin propuestas de adaptaciones. El esfuerzo que conlleva subir reseña diaria solo lo conoce quienes tienen que escribirlas.
    Un abrazo, Inquilinas, y que tengáis un Halloween terrorífico!! :)

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  2. Me encanta la edición que nos traes. No he leído el libro, pero si que he visto la película hace muchos años y me gustó. No me importaría leerlo.
    Besos

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  3. Como dices, me sorprendió cuando la leí. Esperaba algo más siniestro y no tan c ómico e irónico :-)
    Besos.

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  4. A mi me gustó mucho cuando la leí hace unos años, La edición no era tan bonita como esta pero estaba bien. Antes había visto la película es Tim Burton y Johnny Deep me encantan. Seguro que este año cae en la Televisión en algún canal porque como dices es un clásico de estas fechas. Besinos.

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  5. Muy de acuerdo contigo, me gusta mucho este cuento de Irving, pero Ichabod Crane es tan divertido y su narración tan mordaz que poco tiene de escalofriante. Es un relato que te deja con ganas de más, me hubiese encantado que Irving se metiese más a fondo con los habitantes del pueblo XD Y, sí, la peli de Tim Burton es genial porque le da un giro más oscuro pero sigue teniendo a ese Ichabod excéntrico y divertido, por no hablar de punto del cambio de siglo y de esa tecnología vs superstición. Besos y feliz noche de Halloween.

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  6. La leí de muy cría por primera vez, tuve pesadillas durante mucho tiempo, pero me gustaba tanto que a pesar del miedo vi la peli una noche que no estaba mi madre en casa...y vuelta con las pesadillas ⚰️👻🕸️😂

    ¡¡Que selección habéis traído está semana!!
    Besitos 💋💋💋

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  7. Esta es otra de las lecturas que he visto en la tele mil veces y otras tantas versionadas pero luego no he leído. Algún día me voy a tomar en serio leer todas esas pelis vistas en pantalla y que nacieron de un libro.

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  8. Eso te iba a decir yo, que la edición es chulísima. Yo conocí primero la peli, no te voy a engañar. Y lo que pasó es que directamente fue a buscar en el libro la misma historia y me perdí con esas descripciones tan exhaustivas y abandoné. Aunque ahora mismo no lo voy a leer me apunto para el futuro.
    Los que tenemos blog sí apreciamos el esfuerzo que has hecho para leer y sacar 4 reseñas en una semana.
    Besos

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  9. Ay Washington Irvin, que me encantan a mi sus Cuentos de la Alhabra... y que hace siglos que no leo. Tengo la edición de los Cuentos hace muchos años y en esa época nunca me planteé buscar más obras escritas por este autor... La verdad es que me has picado con la obra, la edición y el autor... Voy a ver si me puedo hacer con él.
    Un besazo

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  10. La peli de Burton la he visto muchas veces pero con el libro no me he animado. Pero ahora me habéis dejado con ganas. Esta edición es maravillosa.
    Besotes!!!

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  11. Pues a mí la película, cada vez que la leo, me pone los pelos de punta y me llama la atención que la historia original sea más bien irónica. Me pareció curioso descubrir que el autor es Washington Irving, cuando yo siempre lo he considerado más como un autor de viajes y demas por eso del su libro sobre las leyendas de Granada... en fin, no sé si entra en mi marco de interés este relato, pero tu reseña es magnífica. Un saludo.

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  12. Lo leí en su día y me sorprendió un montón por eso que dices, que tenía en la cabeza la adaptación al cine y me llevé una sorpresa de órdago. Pero me gustó mucho. Besos

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  13. Hola! me encantó tu edición, la mía no es tan bonita jejeje. Coincido contigo, una historia genial y muy distinta a la pelicula de Tim Burton; si encuentro más similitud con una adaptación que hizo Disney, en dibujitos animados, que yo conozco porque a mi marido le chiflaba de pequeño y aún hoy día de vez en cuando la ponemos para su visionado, y me saca más de una risita. En fin, una historia muy chula que también disfruté. Un abrazo.

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  14. Pues también tenía en la cabeza otra idea, diferente a esta que nos cuentas. Quizás por eso me llama la atención, sino al haber visto la peli creo que no me animaría. Por falta de tiempo más que nada.

    besitos

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  15. A mí este tipo de historias es que no me tiran nada, de hecho, no he visto ni la peli, que ya es delito, pero hoy me salto esto aunque tenga una edición chulísima.
    Besos

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  16. Si te soy sincera, me tira mucho más por las ilustraciones que por la historia en sí. Ni lo he leído ni he visto la peli ni nada de nada, pero no me atrae.
    Besotes.

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  17. Lo tenía en el punto de mira desde hace años, pero viendo ahora tus impresiones me doy cuenta de que se aleja bastante de la idea que tenía formada en la cabeza. O al menos es lo que se deduce viendo la película, más lúgubre y siniestra.

    Un beso ;)

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  18. Anda, pues qué curioso que no sea exactamente de terror y que tienda más a la ironía...A tener en cuenta.

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