RESEÑA (by MB) ::: LA EXCEPCIÓN - Auður Ava Ólafsdóttir

Título original: Undantekningin
Autora: Auður Ava Ólafsdóttir
Editorial: Alfaguara 
Traducción: Elías Portela 
Páginas: 296

Fecha esta edición: marzo 2014
Encuadernación: rústica con solapas

Precio: 18,50 euros 
Imagen de cubierta: Kristina Hruska / Millennium Images, UK

«Tú serás la última mujer de mi vida»

Esta es la confesión que escucha María una Nochevieja de boca de su marido, un matemático especialista en la teoría del caos que parecía el hombre perfecto.
Perpleja por la separación, María debe afrontar también la repentina aparición de su padre biológico. Sin embargo, gracias al cortejo de un joven vecino aficionado a la ornitología y a la amistad entrañable de Perla, «doctora en Psicoanálisis, consejera matrimonial y escritora», sus pasos emprenden un nuevo rumbo.

—Una siempre está intentando robar las ideas de la gente con la que se encuentra, siempre algo aprovechable en el sufrimiento ajeno, buscando sucesos y lugares que revelen miedos y deseos.

—Así que el poeta es un cuervo que busca lo que brilla —digo sonriéndole a mi vecina.

—Exacto, así que no voy a negar que existe un cierto peligro en conocer a un escritor —dice ella y se sacude unas migas de la blusa—. Una siempre está trabajando. 

Estas son las palabras que Perla le dice a su vecina María, nuestro personaje principal. María, la que una Nochevieja es despedida por su marido tras más de una década casados sin dejarle siquiera comerse las uvas (bueno, uvas no tenían, pero sí champán y tiramisú para celebrar el nuevo año). Así, sin más miramientos, cuando está con su copa y luciendo uno de esos fantásticos vestidos que su marido le regala con buen gusto y criterio, de sopetón, y antes de las campanadas de medianoche que marcan el cambio de año, le suelta el pastel.

Su marido, Flóki, le dice que su vida en común se quedará en el viejo año, que se ha enamorado de su socio y va a salir del armario para irse a vivir con él y por fin liberarse y ser felices para siempre. Estas son más o menos las palabras que le suelta a su esposa, una mujer bellísima y espectacular que trabaja en una organización humanitaria y es madre de un niño y una niña, gemelos de menos de tres años. Las campanadas que anuncian el nuevo año suponen para ella un giro inesperado y terrorífico que proclaman que su vida, tal como ella la conocía, simplemente va a cambiar.

Su marido Flóki no quiere llevarse nada a su nueva vida junto a su socio, también llamado Flóki. Simplemente quiere hacer borrón y cuenta nueva. De alguna manera se sobreentiende que, para haber llegado a esta elección, ya ha realizado la travesía de su desierto, ha valorado todas las opciones, sus pros y sus contras, y se ha metamorfoseado para darse una oportunidad en el amor y en la vida. Pero la buena de María, ajena (o más bien ciega) a todo esto, se encuentra con el pastel de sopetón, convirtiéndose en lo viejo e inservible que su marido no se quiere llevar a su nueva vida.

Este es el comienzo de La excepción, donde Auður Ava Ólafsdóttir nos cuenta el caos con el que empieza el año su protagonista.

Después de la fiesta, cuando solamente quedan los restos, es cuando María se da cuenta del alcance de las palabras de su marido y la repercusión que tendrán en su vida y en la de sus hijos. Y no las acepta. Antes quiere y debe conocer todas las respuestas a las preguntas que se le plantean y que se van encadenando: ¿por qué?, ¿qué he hecho o qué no he hecho?, ¿cómo va a cambiar mi vida y la de mis hijos...? Quiere recuperar el control, volver a su antigua vida, y aquí es cuando entra en valor su vecina, Perla, consejera matrimonial y escritora de novelas policíacas (realmente escribe para otro autor).

La terapeuta es la que de alguna forma le irá informando de lo que supone una ruptura, que hay preguntas que no tienen respuesta, pero que a veces esa es la solución... Que no hace falta conocer todas las cosas, solamente resulta imprescindible conocerse a uno mismo, y que eso es lo que en realidad ha hecho su marido. Para llegar a este autoconocimiento a partir del caos, se debe exorcizar todo, sacar los esqueletos del armario y contarse la verdad. Un proceso duro, pero necesario, que viviremos junto a María, a la que acompañaremos en la caída de sus vendas, en sus enfoques y, sobre todo, observaremos como su nueva vida no le deja mirar hacia otro lado... Y todo ello desde una doble vertiente: por un lado, la del dolor que le produce la infidelidad de su marido, la ruptura y, por tanto, el cambio de vida que su elección unilateral va a suponer para ella y sus hijos. Por el otro, veremos como el amor y la estima por su pareja no le permiten renunciar a su antigua vida... su resistencia es infinita y no acepta los términos de la nueva situación. 

Con todos estos elementos, capítulos cortos y el frío invierno islandés, nos introducimos en La excepción, una novela muy interesante y particular que sacude al lector y le enfoca en realidades cotidianas que la autora trata desde el lado del abandonado, pero entendiendo todos los términos: solo expone, no intenta moralizar. Gracias a ello crea una historia que dista mucho de resultar triste y pesimista, pues es sencillamente un retrato, o un retazo de vida, que contiene todos sus elementos: la alegría de sus hijos, el humor y la ironía, el amor incondicional por su marido, el entender y aceptar y, sobre todo, el volver a quererse a sí misma después de abandonarse al obligado desconcierto.

En definitiva, lo que Ólafsdóttir dice en su novela, con un lenguaje claro, concreto y sencillo, es que hay muchas clases de amor y muchas formas de interpretarlo, y que la culpa hay que dejarla fuera del tablero para poder resolver los conflictos y aceptar sus distintas metamorfosis.

Auður Ava Ólafsdóttir (Reikiavik, 1958) es autora de varias obras entre las que destacan las novelas La mujer es una isla, con la que obtuvo el Premio de Literatura de la ciudad de Reikiavik y Rosa Candida, traducida con gran éxito a veinte idiomas y galardonada con numerosos e importantes premios.

La excepción (2012) ha sido considerada por la crítica y los lectores islandeses como su mejor novela.