jueves, 26 de mayo de 2022

RESEÑA (by MH) ::: DAISY MILLER - Henry James


 
Título original: Daisy Miller
Autor: Henry James
Editorial: Continental
Traducción: no consta en la edición
Páginas: 132
Fecha publicación original: 1878
Fecha esta edición: febrero 2014
Encuadernación: rústica
Precio: 6,76 euros
La señorita Annie P. Miller aparece en Vevey, Suiza, con su madre y su hermano. Su padre, opulento y tosco nuevo rico, quiere pulirla y europeizarla. Daisy, como es llamada, conoce a un refinado joven norteamericano llamado Winterbourne, que se interesa por ella, desconcertado por su desenfado y su coqueta falta de tacto. Se vuelven a ver en Roma y él trata de corregir la conducta de Daisy, sobre todo cuando comienza a coquetear públicamente con un italiano de poca clase llamado Giovanelli. Esto lleva a que la colonia norteamericana en Roma la condene al ostracismo. Daisy muere de unas fiebres contraídas en plena noche romana a solas con Giovanelli, y sus últimas palabras fueron un recado para Winterbourne: "Decidle que jamás me prometí a Giovanelli", como una invitación casi póstuma a largo noviazgo de ultratumba. Toda la tensión de amor y recelo entre Daisy y Winterbourne se debieron exclusivamente a un desajuste social.


Quería traeros al blog alguna obra corta de Henry James, que desde que os hablé hace ya tres años de Lo que Maisie sabía no había vuelto a acercarme al autor (en el blog, me refiero... leerlo sí lo he leído durante este tiempo). Hay mucho donde elegir, porque aunque James es reconocido sobre todo por sus novelas largas, es en sus nouvelles y relatos donde condensa en breves pero rotundas pinceladas todos los temas que definen su obra. Así pues, y tras algún que otro contratiempo, hoy por fin vengo a hablaros de Daisy Miller (contratiempo en forma de castigo por ser superficial con las ediciones. Compré una muy bonita pero me encontré una traducción que era todo lo contrario y que tuve que abandonar... era eso o tirar el libro por la ventana. La edición que traigo hoy necesita veinte correcciones, pero al menos se puede leer sin querer arrancarte los ojos y los personajes se hablan de una manera normal y adecuada para la época... que tampoco es que pida mucho, lo prometo).
 
La historia comienza en Vevey, un pequeño pueblo suizo situado a orillas del lago Lemán donde acuden de manera regular muchos turistas tanto europeos como norteamericanos. Allí pasa unos días el señor Winterbourne, norteamericano de nacimiento que hace muchos años que vive en Suiza, cuando conoce a Daisy Miller, jovencita norteamericana que está viajando por Europa junto a su madre y su hermano. Winterbourne se siente tan fascinado como desconcertado desde el primer momento ante la actitud de la señorita Miller, que lo trata desde el instante en que se conocen, sin tan siquiera saber su nombre, con una confianza muy mal vista por pagos europeos. Esta total ausencia de decoro y respeto por la rectitud moral recibe críticas de todo el mundo, y aunque Winterbourne la asocia al principio a la coquetería ingenua y típica de las muchachas norteamericanas, nunca termina de tenerlas todas consigo... ¿es realmente tan ingenua como él cree o solo una fresca a la que no conviene acercarse demasiado? Porque él está perdidamente enamorado, pero Daisy no se ajusta a lo que cabe esperar de una joven soltera que debe cuidar de su reputación.

Daisy Miller apareció por primera vez en The Cornhill Magazine, una revista literaria mensual que comenzó a publicarse en 1860 y que finalmente cerró sus puertas en 1975 (como curiosidad, nació para hacerle la competencia a All The Year Round, la revista de similares características que publicaba Charles Dickens, y para tal efecto ficharon como editor nada menos que a William Makepeace Thackeray, autor de La feria de las vanidades... y consiguió dicho éxito publicando novelas por entregas de autores como Elizabeth Gaskell, Wilkie Collins, Anthony Trollope, Thomas Hardy, el propio Henry James, etc...). El caso es que Daisy Miller vio la luz en esta revista en 1878, fue publicado como libro el año siguiente y, a día de hoy, sigue siendo una de sus obras más conocidas y aclamadas.

¿Qué ofrece Daisy Miller? Pues algunos de los temas que pulularon por toda la obra de su autor pero en una ración condensada en poco más de cien páginas... como esos frasquitos de perfume de muestra para llevar en el bolso: contienen el mismo producto que el frasco grande pero en un tamaño mucho más manejable. Y con esto os estoy diciendo que si leer a Henry James en sus novelas largas se os hace cuesta arriba, no dejéis de probar a leerlo en su narrativa corta, que hay mucho donde elegir, casi siempre se movía por cauces muy parecidos a sus obras más reconocidas y merecen muchísmo la pena. Y ya puestos a recomendar, como sé que la prosa densa de este autor no siempre entusiasma, os aconsejo su obra más temprana, donde ya era un maestro escribiendo pero su estilo era mucho más accesible. Daisy Miller pertenece a este último grupo; apenas ("apenas") había publicado tres libros antes de esta nouvelle y justo después publicó Washington Square (maravillosa, si me preguntáis a mí).

Bueno, al lío, que me disperso. ¿Cuáles son esos dos temas que imperan en Daisy Miller? Uno de ellos, invariablemente, es el de enfrentar las costumbres y sociedad europeas con las americanas. Winterbourne es norteamericano pero lleva muchos años viviendo en Europa, y su moral, su sentido del decoro y su idea de las buenas maneras en sociedad son las europeas: una jovencita no habla con otra persona si no ha sido presentada antes, no debe andar sola por ahí con hombres y por tanto tiene que ir siempre acompañada por alguien que otorgue respetabilidad a situaciones que pueden comprometer su reputación, debe ser prudente y no decir lo primero que se le pasa por la cabeza, no deben verla acompañada siempre por el mismo hombre y mucho menos pasearse de noche con él...  No os sorprenderá si os digo que todo esto y mucho más es lo que hace Daisy Miller desde el primer momento en que aparece en la novela. Winterbourne descarga todas sus dudas en el hecho de que ella sea americana y en que allí las etiquetas sociales son menos estrictas, pero lo cierto es que durante todo el libro vemos que Daisy es criticada por igual tanto por europeos como por norteamericanos que, en principio, si de verdad el problema fuese "la nacionalidad", la comprenderían o se identificarían con ella en lugar de atacarla. Así que sí, este tema está patente durante toda la historia, pero parece que los tiros van más en la otra dirección, ese segundo tema que os decía que introduce el autor.
¿Qué es lo que ha hecho?

Todo lo que aquí no se hace. Coquetear con el primero que encuentra, sentarse en los rincones con misteriosos italianos, bailar toda la noche con la misma pareja, recibir visitas a las once de la noche. Cuando llegan los visitantes su madre se retira.

Básicamente, damas y caballeros, lo que intenta dilucidar esta historia es la respetabilidad de Daisy Miller, su decoro, su decencia, su virtud y si es o no una desvergonzada, y Winterbourne navega todo el libro entre sus propias sensaciones (que tienden a otorgarle inocencia en todas sus acciones o como mucho a achacarlas a su falta de cultura y de buena educación) y las sensaciones de todos los demás (que tienden a condenarla como una perdida y una fresca). Daisy se sabe objeto de todas estas atenciones y discusiones, sabe que es la comidilla de la buena sociedad y que hasta los sirvientes se ríen desvergonzadamente cada vez que un hombre acude a visitarla, y se pasa todo por el arco del triunfo (Henry James se estará revolviendo en su tumba ante tamaña ordinariez). Actúa como cree conveniente, se comporta como estima oportuno y no recula ni un milímetro cuando un hombre intenta decirle lo que tiene que hacer y como debe comportarse. No puedo ir más allá, es una historia muy corta, pero la novela pone sobre la mesa más escenarios y temáticas de los que pueda parecer a primera vista.
Nunca he permitido a caballero alguno decirme lo que tengo que hacer, o interferir en algo que yo haga.
A título personal, la lectura de este libro ha tenido un aliciente extra: su ambientación, o su doble ambientación, en realidad. En la primera parte de la historia, y gracias a su ubicación en una localidad del Cantón de Vaud, los personajes visitan el castillo de Chillon, una maravilla de origen medieval a orillas del lago Lemán que tuve la oportunidad de visitar yo también hace unos años y que siempre recordaré porque estaba cayendo el diluvio universal y mientras todo el mundo se resguardaba donde podía yo fui casi nadando con tal de no quedarme sin verlo. Inspiración para multitud de escritores (Flaubert, lord Byron, Dumas...) merece que os acerquéis a él si pasáis por aquellos lares, y si accedéis desde el largo paseo costero que va desde Montreux hasta allí, os encontraréis también un monumento a Freddie Mercury (pasó en aquella zona parte de su vida). En fin, que me han hecho ilusión las escenas ambientadas en este castillo, nunca había leído nada situado en Chillon. La segunda parte de la historia está ambientada en Roma, de la que por razones obvias no hace falta que comente nada salvo que la adoro y que espero volver a pisar algún día (sería la tercera vez). Fin del kitkat turístico que no interesa a nadie pero que yo os endoso, que para eso es mi casa :)

En fin, ¿por qué recomiendo leer Daisy Miller? Os diría que porque es Henry James y eso ya es suficiente motivo, pero como soy consciente de la aversión que produce en ciertos lectores (que no comparto, huelga decirlo), tengo que ir más allá. Así que al hecho de ser un Henry James añadiría que también es un buen ejemplo de su narrativa corta en su primera etapa como escritor, y eso implica que tiene mucho de lo bueno que le hizo famoso pero sin el estilo un tanto barroco que muchos deploran. Es decir, que acomete temas interesantes como las diferencias entre la clase burguesa americana y la europea, el rol de la mujer en el último cuarto del siglo XIX, la rebeldía de la mujer joven y moderna ante las normas y restricciones sociales imperantes en la época (las New Women no tardarían en hacer su aparición en escena), las consecuencias y castigos impuestos por una sociedad que no estaba todavía preparada para esa reclamación de independencia y libertad, la carencia de inteligencia emocional a la hora de juzgar el carácter y comportamiento de otras personas, la ausencia de valentía a la hora de hacer primar las opiniones propias ante las ajenas por miedo a sufrir el rechazo de la buena sociedad... muchos caminos que transitar en pocas páginas y todos espléndidamente introducidos y pincelados por el autor de una manera tan sutil y sencilla como redonda, aguda e inteligente. A Daisy Miller no le sobra ni le falta nada, y si a día de hoy sigue siendo una de las obras más reconocidas y aclamadas de James, por encima incluso de algunas mucho más famosas, por algo será.
 

Henry James nació en Nueva York en 1843, en el seno de una rica y culta familia de origen irlandés. Recibió una educación ecléctica y cosmopolita, que se desarrolló en gran parte en Europa¬. En 1875, se estableció en Inglaterra, después de publicar en Estados Unidos sus primeros relatos. El conflicto entre la cultura europea y la norteamericana está en el centro de muchas de sus obras, desde sus primera novelas, Roderick Hudson (1875), Washington Square (1880) o El americano (1876-1877), hasta El Eco (1888) o La otra casa (1896) y la trilogía que culmina su carrera: Las alas de la paloma (1902), Los embajadores (1903) y La copa dorada (1904).

Maestro de la novela breve y el relato, algunos de sus logros más celebrados se cuentan entre este género: Los papeles de Aspern (1888), Otra vuelta de tuerca (1898), En la jaula (1898), Los periódicos (1903) o las narraciones reunidas en Lo más selecto. Fue asimismo un brillante crítico y teórico, como atestiguan los textos reunidos en La imaginación literaria.

Nacionalizado británico, murió en Londres en 1916.

lunes, 23 de mayo de 2022

RESEÑA (by MH) ::: ASESINATO EN MESOPOTAMIA - Agatha Christie


 

Título original: Murder in Mesopotamia
Autora: Agatha Christie
Editorial: RBA
Traducción: Ángel Soler Crespo
Páginas: 240
Fecha de publicación original: 1936
Fecha esta edición: 2010
Encuadernación: cartoné
Precio: descatalogado (disponible de segunda mano)



https://inquilinasnetherfield.blogspot.com/p/esta-pagina-la-abro-yo-mh-modo-personal.html
En pleno desierto iraquí, en un campamento arqueológico situado junto al yacimiento de Tell Yarimjah, Mrs. Leidner da signos de una creciente manía persecutoria que le provoca aterradoras alucinaciones. Aunque nadie da mayor importancia a sus temores, ya que cree que pretenden asesinarla, su marido -el director de la excavación- contrata a una experta enfermera para que cuide de ella. El Dr. Leidner y su equipo sólo comprenden la gravedad del asunto cuando la mujer aparece muerta en su lecho con una horrible herida en la cabeza. En este nuevo caso de Agatha Christie, el detective Hércules Poirot se enfrentará a misterios que parecen ir más allá de sus posibilidades. La autora británica mezcla en esta ocasión lo razonable con lo sobrenatural para conducir al lector a un laberinto de sospe-chas, indicios y pistas que alejarán progresivamente la resolución del crimen. Poirot, que contará con la inestimable ayuda de la enfermera Leatheran, deberá aplicar con esmero sus particulares métodos de indagación para dar finalmente con el asesino.
 
Os dije que volvería prontito con otro Agatha Christie y aquí estoy... casi dos meses después. Desde hace tiempo me cuesta un mundo sentarme a escribir reseñas, no me lo tengáis en cuenta. Seguimos en el año 1936 pero nos vamos nada menos que a Mesopotamia. Cómo se va notando desde hace unos libros el cambio de vida que experimentó Agatha desde que en 1930 viajó sola por primera vez a Bagdad, comenzó a visitar zonas arqueológicas, a trabar amistad con los integrantes de las excavaciones y a convertir todo eso en parte de su propia vida durante varias décadas tras casarse con Max Mallowan, con quien viajaba frecuentemente al Medio Oriente. Ya introdujo a dos arqueólogos como personajes y se habló de excavaciones en Muerte en las nubes, y en este libro que hoy nos ocupa ya directamente ambienta su misterio entre los integrantes de una excavación arqueológica en Irak. 
 
La historia, tal como digo, nos lleva al desierto iraquí, donde se está llevando a cabo una expedición arqueológica al mando del doctor Leidner. Su esposa, que lo acompaña en la excavación, lleva un tiempo nerviosa, tiene miedo de algo o alguien que no nombra, ve cosas que los demás no ven... y en una localizacion tan pequeña como esa, en la que todos los miembros de la expedición viven en el mismo edificio y comparten todas las horas del día que no están destinadas al trabajo, resulta incómodo. Por ello el doctor Leidner busca la ayuda de Amy Leatheran, enfermera que queda libre de su trabajo en Bagdad justo en ese momento, y que llega a la expedición para cuidar de la señora Leidner. La enfermera Leatheran encuentra a su llegada un ambiente extraño, tenso, con unas dinámicas entre los miembros de la expedición un tanto raras... hasta que se comete un asesinato de estos que parecen de difícil resolución, a primera hora de la tarde en un lugar con un acceso muy limitado donde siempre hay gente pululando y donde parece imposible que alguien entre y salga sin que absolutamente nadie lo vea. Pero el caso es que el crimen se ha cometido y que hay que resolverlo, y para eso nada mejor que Hércules Poirot, que "casualmente" pasaba por Mesopotamia :)
 
Estamos nuevamente ante un caso de Poirot (y es ya el decimocuarto de su carrera... os recuerdo que, aunque miss Marple es muy famosa, realmente protagonizó muy poquitos libros si tenemos en cuenta la extensísima produccion de su creadora, y salvo una recopilación de relatos, entre su primer caso y el segundo pasaron doce años)... bueno, decía que estamos ante un nuevo caso de Poirot, y como la acción transcurre en Mesopotamia y su aparición está pillada con pinzas (la autora dice en la novela que es una casualidad y aparentemente no se molesta en inventarse una buena excusa... y la palabra clave es "aparentemente", porque era más lista que el hambre e hilaba muy fino. Os explico esto al final, porque de casualidad nada), en esta ocasión no hay Hastings que valga, así que se busca otro narrador que realice las funciones que habitualmente realiza Hastings: la elegida es una mujer, la enfermera Amy Leatheran.
 
La enfermera Leatheran funciona a la perfección como narradora tanto por su precisión en los detalles como por no guardarse ni una sola de sus opiniones sobre cada uno de los personajes que forman parte de esta historia, Poirot incluido (ya sabemos que el detective belga, de primeras, no impresiona a nadie). Además sabe expresar muy bien el ambiente que reina en esta excavación, donde se percibe tirantez, ansiedad, desasosiego y una sensación constante de que algo malo va a pasar (y pasa, claro... de otro modo no estaríamos hablando del libro xD). Me ha gustado también mucho lo bien y sencillo que explica cómo funcionaba una expedición arqueológica en aquella época, el rol que cumplía cada uno de sus componentes, a qué se dedicaban los acompañantes que no tenían una ocupación per sé en la dinámica diaria, la permanente presencia de ayudantes locales pululando por todas partes y la convivencia en un espacio no demasiado grande donde cruzarse con alguien a cada momento era una tónica habitual que hacía casi imposible guardar secretos o mantener una cierta privacidad. 
 
Rencores, desavenencias, resentimientos, enemistades, atracciones, afinidades, posibles romances, conflictos de personalidades... una comunidad pequeña pero muy heterogénea en la que caben todo tipo de sentimientos es caldo de cultivo para un asesinato imposible a priori pero que por razones obvias sí puede llevarse a cabo, y además pronto queda claro que la personalidad de la víctima, los secretos que escondía y el enrarecimiento que ambos factores impulsaba en las relaciones entre todas las personas que la rodeaban será clave para resolver el asesinato. Ya sabemos lo bien que se le dan a la Christie este tipo de situaciones, y llevárselo al desierto es una manera de rodear de más dificultades un asesinato que ya de por sí se plantea complicado... pero como dice Poirot en cierto momento, lo imposible es precisamente lo que investiga más a fondo.
 
Os decía antes que Agatha hilaba muy fino, y os cuento por qué. En la cronología de las novelas protagonizadas por Poirot, justo en este momento no tiene razón de ser que esté así por que así en Mesopotamia, y de hecho la propia Agatha lo justifica como una simple casualidad... pero en realidad no lo es tanto, y como quien no quiere la cosa lanza un detalle al vuelo durante la narración al decir como de pasada que Poirot acaba de resolver un asesinato a bordo de un tren... lo que temporalmente sitúa a Poirot en esta novela poco después de haber resuelto el crimen de Asesinato en el Orient Express, que evidentemente, dada la ruta del tren, le llevaba por aquellos lares asiáticos, y que fue publicado dos años antes. ¿Cómo apaña esto con el hecho de que entre Asesinato en el Orient Express y Asesinato en Mesopotamia se publicasen varios libros de Poirot  con el personaje ya tranquilamente de vuelta en Londres desde hace mucho tiempo? Pues cogiendo una narradora totalmente ajena al universo Poirot que cuenta su historia bastante tiempo después de que ocurriese a petición de otro de los personajes implicados. Así que todo queda ordenadito y mucho más argumentado de lo que nos quiere dar a entender Agatha en el propio libro... y para tonterías como esta, que a vosotros os darán igual pero que te hace feliz descubrir como lectora, se leen las bibliografías en orden. Ya lo he dicho muchas veces. Para esto, para acompañar la progresión de los personajes y para ser testigos de como la vida personal de Agatha se traslada a sus novelas, tanto cuando esa vida le iba bien como cuando le fue mal o como cuando sus nuevas experiencias vitales resultaban el marco perfecto para nuevas intrigas y asesinatos. Suerte que Poirot le salió muy viajero casi desde el principio... :)



Agatha Christie (1891-1976) es conocida en todo el mundo como la Dama del Crimen. Es la autora más publicada de todos los tiempos, tan solo superada por la Biblia y Shakespeare. Sus libros han vendido más de un billón de copias en inglés y otro billón largo en otros idiomas. Escribió un total de ochenta novelas de misterio y colecciones de relatos breves, diecinueve obras de teatro y seis novelas escritas con el pseudónimo de Mary Westmacott.

Probó suerte con la pluma mientras trabajaba en un hospital durante la primera guerra mundial, y debutó con El misterioso caso de Styles en 1920, cuyo protagonista es el legendario detective Hércules Poirot, que luego aparecería en treinta y tres libros más. Alcanzó la fama con El asesinato de Roger Ackroyd en 1926, y creó a la ingeniosa miss Marple en Muerte en la vicaría, publicado por primera vez en 1930.