Título original: Agatha Raisin and the vicious vet
Autora: M.C. Beaton
Editorial: Círculo de Lectores
Traducción: Vicente Campos González
Páginas: 240
Ilustración de cubierta: Pep Boatella
Todo el mundo de descanso y yo aquí a lo mío, pero es que tengo mucho pendiente de reseñar y no puedo desaprovechar días. Sé que no me va a leer nadie, pero yo dejo constancia de la lectura :)
Hace un par de años reseñé la primera novela protagonizada por Agatha Raisin, y dejé un poco paradas las lecturas porque el cuarto no lo consigo en papel y no quiero quedarme estancada. Al final ha podido más la curiosidad por seguir con el personaje, y cuando me toque llegar a ese cuarto libro, pues se hará lo que se pueda (aka leerlo en ebook, no me va a quedar otra... salvo que algún alma cándida decida deshacerse de él de aquí a entonces y me dé tiempo a pillarlo. Es que quiero la colección en papel, qué le voy a hacer. Cruzo los dedos).
La historia comienza cuando Agatha regresa a Carsely, el pequeño pueblo en el que vive en plenos Cotswolds, después de unas fallidas vacaciones en las que viajó a las Bahamas tras los pasos de su vecino, James Lacey, mientras que Lacey, que huye de ella cada vez que la intuye, se había imaginado la persecución y había cambiado de destino largándose al El Cairo sin decir ni pío. Vamos, que Agatha está que trina: tal y como se dice en el libro, cuando persigue a un hombre, es tan implacable como lo fue en su momento en los negocios. El caso es que para desquitarse le hace ojitos al nuevo veterinario local, pero no es la única: la consulta está siempre atestada de vecinas con sus mascotas, tengan estas algo que realmente precise de la visita o no. El día en que el veterinario aparece asesinado, empiezan a salir los trapos sucios sobre un hombre que no era lo que aparentaba y que tenía un buen número de mujeres enfadadas a su espalda. ¿Quién lo habrá matado? Porque hay muchos posibles sospechosos... Por circunstancias de la vida, y para sorpresa de ambos, Agatha y Lacey investigarán juntos el asesinato, y esta insospechada colaboración provoca reacciones muy distintas en ellos, porque Agatha vuelve a dejar volar la imaginación y ya se ve camino del altar junto al guapo militar, mientras que Lacey precisamente colabora con ella porque piensa que ya se le ha pasado el enamoramiento y está a salvo de sus nada sutiles avanzadillas.
Pues nada, aquí estamos de nuevo con Agatha en su retiro tras la jubilación en un pequeño pueblo en el que parece que no pasa nada y siempre se cargan a alguien (¡alló, miss Marple!). También tenemos a una Agatha que sigue un pelín (muuuuuy) obsesionada con su vecino, James Lacey, un atractivo militar retirado que huye de ella como alma que lleva el diablo. Además persisten en ella las dudas del primer libro: cree que no tendría que haberse jubilado, que estaba mejor en Londres... aunque al final siempre tiene que admitir que está encantada de la vida en su pueblecito de la campiña inglesa.
Realmente Agatha no pretende resultar simpática en ningún momento, y no lo es, pero tiene de cada cosa, le pasa de cada cosa, que te tienes que reír aunque no quieras. Y lo admito, me gustó el primero, pero con este me he reído a carcajadas en alguna escena (tengo una en concreto en la cabeza ahora mismo, y hace ya sus meses que leí el libro... no se me olvida y me sigo riendo cuando me acuerdo). Si el de la quiche letal me gustó, este lo he disfrutado más, porque entre otras cosas va más al grano al no tener que presentar personajes, ambientación, vecinos, etc... Abrimos las páginas conociendo ya el mundo de Agatha, así que lo que toca es adentrarse sin dilaciones en el misterio y ver cómo va avanzando la relación entre ella y Lacey por un lado, y entre ella y sus vecinos por otro.
Y es que si Lacey acepta colaborar con ella es porque le aburre intensamente el libro que está escribiendo sobre historia militar y decide meterse a detective en busca de un poco acción; por otro lado, y más importante, porque también cree que Agatha ya no le persigue, cuando realmente son las circunstancias las que hacen que lo parezca. Así que Lacey pasa de no abrirle la puerta a Agatha y hacer siempre como que no está en casa cada vez que le visita, a pasarse todo el día junto a ella y fomentar habladurías en el pueblo, cosa que él no se toma bien porque no son verdad y que ella no se toma bien porque se da cuenta de que él no se lo toma bien xD ¿Y qué pareja forman como detectives? Pues horrorosa, una pareja horrorosa, son como elefantes en una cacharrería, pero siempre acaban por averiguar algún indicio aunque sea de rebote y de ahí van tirando para seguir adelante con la investigación.
También recuperamos a Bill Wong, un policía de veintitantos años con mucha guasa y retranca que parece más maduro que Agatha a su cincuenta y tantos. Encima conocemos en este libro a sus padres, escena que no tiene ningún desperdicio tanto por lo particulares que son como por la aparente ignorancia de Bill de esa particularidad :)
No, no os estoy contando nada de la investigación, pero ya sabéis que no suelo hacerlo. En este tipo de libros es normalmente mucho más interesante la dinámica que se forma alrededor del asesinato que el propio asesinato en sí mismo, porque gracias a él las relaciones entre los distintos personajes se modifican en muchos sentidos, conocemos más a fondo a los vecinos del pueblo o nos presentan a otros nuevos, somos testigos de cómo Agatha se va integrando poco a poco en la comunidad muy a su pesar (o eso cree ella), y al final vamos descubriendo a una nueva Agatha, esa que toda la vida lo ha hecho todo sola, que ha salido adelante profesionalmente siendo agresiva y autoritaria, y que poco a poco va cayendo en las redes de la amistad y la convivencia, volviéndose un poco más cálida y cercana.
¿Que todo esto ocurre porque han asesinado a un veterinario? Pues sí, y tela con el veterinario, todo un personaje... un elemento de cuidado que iremos descubriendo conforme Agatha y Lacey van destapando cosas (queriendo o sin querer). ¿Moraleja del libro? Queridas habitantes de Carsely, por muy vista que tengáis a la sección masculina del pueblo, ¡huid de los veterinarios guapos que aparecen de la nada con ínfulas de gigolós y que odian (mucho, muchísimo) a los perros y a los gatos! xD
El siguiente es Agatha Raisin y la jardinera plantada. De este verano no pasa :)
Páginas: 240
Fecha de publicación original: 1993
Fecha esta edición: 2014
Fecha esta edición: 2014
Encuadernación: cartoné con sobrecubierta
Precio: 5,69 euros (kindle) + descatalogado en papel (disponible de segunda mano)Ilustración de cubierta: Pep Boatella
OTROS LIBROS RESEÑADOS DE LA SERIE AGATHA RAISIN:
Con un chasco. Así empieza la última aventura de Agatha Raisin: se ha
ido a las Bahamas persiguiendo a su adorado James Lacey, pero resulta
que él, quizá para esquivarla, no está en las Bahamas, sino más bien en
El Cairo. ¿En qué momento se le ocurrió a la pobre Agatha dejar Londres
por una vida insulsa y sin hombres en la campiña inglesa? La llegada al
pueblo de un joven veterinario suscita el interés de muchas mujeres de
mediana edad... y también el espíritu competitivo de Agatha, que no
dudará en llevar a su gata (sana) para que la visite. Nuestra heroína no
se irá con las manos vacías, y conseguirá que el veterinario la invite
a cenar. ¿Despertará ese logro la envidia de sus competidoras? ¿Podrá
provocar los celos de James Lacey? Agatha apenas puede saborear las
mieles de su modesto triunfo: el veterinario aparece muerto en acto de
servicio, justo cuando se disponía a operar a un caballo. Convencida de
que se trata de un asesinato, Agatha embaucará a James Lacey para que la
acompañe en sus hazañas detectivescas...
Hace un par de años reseñé la primera novela protagonizada por Agatha Raisin, y dejé un poco paradas las lecturas porque el cuarto no lo consigo en papel y no quiero quedarme estancada. Al final ha podido más la curiosidad por seguir con el personaje, y cuando me toque llegar a ese cuarto libro, pues se hará lo que se pueda (aka leerlo en ebook, no me va a quedar otra... salvo que algún alma cándida decida deshacerse de él de aquí a entonces y me dé tiempo a pillarlo. Es que quiero la colección en papel, qué le voy a hacer. Cruzo los dedos).
La historia comienza cuando Agatha regresa a Carsely, el pequeño pueblo en el que vive en plenos Cotswolds, después de unas fallidas vacaciones en las que viajó a las Bahamas tras los pasos de su vecino, James Lacey, mientras que Lacey, que huye de ella cada vez que la intuye, se había imaginado la persecución y había cambiado de destino largándose al El Cairo sin decir ni pío. Vamos, que Agatha está que trina: tal y como se dice en el libro, cuando persigue a un hombre, es tan implacable como lo fue en su momento en los negocios. El caso es que para desquitarse le hace ojitos al nuevo veterinario local, pero no es la única: la consulta está siempre atestada de vecinas con sus mascotas, tengan estas algo que realmente precise de la visita o no. El día en que el veterinario aparece asesinado, empiezan a salir los trapos sucios sobre un hombre que no era lo que aparentaba y que tenía un buen número de mujeres enfadadas a su espalda. ¿Quién lo habrá matado? Porque hay muchos posibles sospechosos... Por circunstancias de la vida, y para sorpresa de ambos, Agatha y Lacey investigarán juntos el asesinato, y esta insospechada colaboración provoca reacciones muy distintas en ellos, porque Agatha vuelve a dejar volar la imaginación y ya se ve camino del altar junto al guapo militar, mientras que Lacey precisamente colabora con ella porque piensa que ya se le ha pasado el enamoramiento y está a salvo de sus nada sutiles avanzadillas.
Pues nada, aquí estamos de nuevo con Agatha en su retiro tras la jubilación en un pequeño pueblo en el que parece que no pasa nada y siempre se cargan a alguien (¡alló, miss Marple!). También tenemos a una Agatha que sigue un pelín (muuuuuy) obsesionada con su vecino, James Lacey, un atractivo militar retirado que huye de ella como alma que lleva el diablo. Además persisten en ella las dudas del primer libro: cree que no tendría que haberse jubilado, que estaba mejor en Londres... aunque al final siempre tiene que admitir que está encantada de la vida en su pueblecito de la campiña inglesa.
Realmente Agatha no pretende resultar simpática en ningún momento, y no lo es, pero tiene de cada cosa, le pasa de cada cosa, que te tienes que reír aunque no quieras. Y lo admito, me gustó el primero, pero con este me he reído a carcajadas en alguna escena (tengo una en concreto en la cabeza ahora mismo, y hace ya sus meses que leí el libro... no se me olvida y me sigo riendo cuando me acuerdo). Si el de la quiche letal me gustó, este lo he disfrutado más, porque entre otras cosas va más al grano al no tener que presentar personajes, ambientación, vecinos, etc... Abrimos las páginas conociendo ya el mundo de Agatha, así que lo que toca es adentrarse sin dilaciones en el misterio y ver cómo va avanzando la relación entre ella y Lacey por un lado, y entre ella y sus vecinos por otro.
Y es que si Lacey acepta colaborar con ella es porque le aburre intensamente el libro que está escribiendo sobre historia militar y decide meterse a detective en busca de un poco acción; por otro lado, y más importante, porque también cree que Agatha ya no le persigue, cuando realmente son las circunstancias las que hacen que lo parezca. Así que Lacey pasa de no abrirle la puerta a Agatha y hacer siempre como que no está en casa cada vez que le visita, a pasarse todo el día junto a ella y fomentar habladurías en el pueblo, cosa que él no se toma bien porque no son verdad y que ella no se toma bien porque se da cuenta de que él no se lo toma bien xD ¿Y qué pareja forman como detectives? Pues horrorosa, una pareja horrorosa, son como elefantes en una cacharrería, pero siempre acaban por averiguar algún indicio aunque sea de rebote y de ahí van tirando para seguir adelante con la investigación.
También recuperamos a Bill Wong, un policía de veintitantos años con mucha guasa y retranca que parece más maduro que Agatha a su cincuenta y tantos. Encima conocemos en este libro a sus padres, escena que no tiene ningún desperdicio tanto por lo particulares que son como por la aparente ignorancia de Bill de esa particularidad :)
No, no os estoy contando nada de la investigación, pero ya sabéis que no suelo hacerlo. En este tipo de libros es normalmente mucho más interesante la dinámica que se forma alrededor del asesinato que el propio asesinato en sí mismo, porque gracias a él las relaciones entre los distintos personajes se modifican en muchos sentidos, conocemos más a fondo a los vecinos del pueblo o nos presentan a otros nuevos, somos testigos de cómo Agatha se va integrando poco a poco en la comunidad muy a su pesar (o eso cree ella), y al final vamos descubriendo a una nueva Agatha, esa que toda la vida lo ha hecho todo sola, que ha salido adelante profesionalmente siendo agresiva y autoritaria, y que poco a poco va cayendo en las redes de la amistad y la convivencia, volviéndose un poco más cálida y cercana.
¿Que todo esto ocurre porque han asesinado a un veterinario? Pues sí, y tela con el veterinario, todo un personaje... un elemento de cuidado que iremos descubriendo conforme Agatha y Lacey van destapando cosas (queriendo o sin querer). ¿Moraleja del libro? Queridas habitantes de Carsely, por muy vista que tengáis a la sección masculina del pueblo, ¡huid de los veterinarios guapos que aparecen de la nada con ínfulas de gigolós y que odian (mucho, muchísimo) a los perros y a los gatos! xD
El siguiente es Agatha Raisin y la jardinera plantada. De este verano no pasa :)
M.C. Beaton es el seudónimo tras el que se esconde Marion Chesney cuando escribe novelas policíacas y de misterio.
Nacida en Glasgow en 1936, trabajó para varios periódicos y revistas como crítica teatral, editora de moda, reportera de sucesos y reportera jefe de la sección "Mujer". Después de casarse y tener un hijo, la familia emigró a Estados Unidos donde, tras unos inicios difíciles, conseguiría trabajo en el nuevo periódico sensacionalista de Rupert Murdoch: The Star.
Ansiosa por pasar más tiempo en casa con su hijo pequeño, Marion comenzó a escribir novelas de forma prolífica. Un curso de pesca durante las vacaciones le inspiró su primera novela policíaca, que daría lugar a la serie del detective Hamish Macbeth. De vuelta a Escocia, Marion y su esposo compraron una granja para dedicarse a la cría de ovejas, pero posteriormente se mudaron a la apacible región de los Cotswolds, donde, en 1992, nacería Agatha Raisin, la carismática investigadora de una de las series de novelas de misterio más populares en el Reino Unido, y de la que hasta la fecha se han publicado más de veinte títulos.
Nacida en Glasgow en 1936, trabajó para varios periódicos y revistas como crítica teatral, editora de moda, reportera de sucesos y reportera jefe de la sección "Mujer". Después de casarse y tener un hijo, la familia emigró a Estados Unidos donde, tras unos inicios difíciles, conseguiría trabajo en el nuevo periódico sensacionalista de Rupert Murdoch: The Star.
Ansiosa por pasar más tiempo en casa con su hijo pequeño, Marion comenzó a escribir novelas de forma prolífica. Un curso de pesca durante las vacaciones le inspiró su primera novela policíaca, que daría lugar a la serie del detective Hamish Macbeth. De vuelta a Escocia, Marion y su esposo compraron una granja para dedicarse a la cría de ovejas, pero posteriormente se mudaron a la apacible región de los Cotswolds, donde, en 1992, nacería Agatha Raisin, la carismática investigadora de una de las series de novelas de misterio más populares en el Reino Unido, y de la que hasta la fecha se han publicado más de veinte títulos.
¡Hola! No conocía estos libros, y tienen muy buena pinta. Qué pena que ya no se puedan conseguir en papel, buscaré la versión digital para leerlos, me ha picado mucho la curiosidad.
ResponderEliminarUn beso y gracias por la recomendación.
Buenaas!
ResponderEliminarNo conocía este libro la verdad, pero no creo que lo vaya a leer, aunque parece interesante ^^
Gracias por la reseña <3
Empecé a leer el primero en inglés (por aquello de leer en inglés inglés, no traducido y lo dejé porque me resultaba difícil de tan coloquial que es el lenguaje. Me decanté por el último de Camilla Lackberg mucho más fácil jajaja
ResponderEliminarPor qué no encuentras el cuadro en papel? Están descatalogados estos libros?
Besos
Hola guapa, cómo que no va a haber nadie leyéndote... pues mira yo estoy aquí, jeje ... (aunque te ha pasado como a mi, yo me planteaba si poner reseña hoy o no, jeje...)
ResponderEliminarEste le leí hace ya tiempo, ya sabes, y me gustó mucho... Me gusta Agatha Raisin y sus aventuras, pero es verdad que hay que degustarla de a poquito porque sus novelas cada vez se van pareciendo más en la estructura y eso me cansa un poco...
Espero que disfrutes del siguiente...
Un besazo
¡Qué divertida parece la novela! Y divertidísima también tu reseña!!
ResponderEliminarEstas novelas ambientadas en localidades inglesas a lo Mapp y lucia o Señorita Buncle me rechiflan. Llevo tiempo queriendo leer el título anterior y creo que es un buen momento para hacerme con la dos novelas. Me pongo a la búsqueda.
Un abrazo y feliz descanso!!
El título es tremendo.
ResponderEliminarMe apetece mucho esta serie pero en papel solo la he visto en el círculo de lectores. En fin, tendré que esperar a encontrarla de segunda mano. Besinos.
ResponderEliminarhola! Agatha Raisin...!!!! me hace ojitos de nuevo y yo sin conocerla, gracias! saludosbuhos.
ResponderEliminarHola!!! Muy buena reseña. He visto la serie por tv. En algún momento iré por su lectura. Un saludo cordial desde el sur argentino!
ResponderEliminarQue sí mujer, que sí te leemos. Le tengo el ojo echado, pero todavía no he probado, no. Un besote.
ResponderEliminarA mi los libros de Agatha Raisin me parecen entrenidos y me gusta su lectura, he leído todos los publicados en digital y espero al siguiente.
ResponderEliminarBesos
Yo llego tarde a la reseña pero llego!! jajaja Conocí esta colección gracias a ti y me llama muchísimo la atención, pero la empezaría por el principio para no perderme nada ;)
ResponderEliminarBesitos
Hombre sí, un veterinario que odie perros y gatos es para desconfiar, como mínimo. No me llama mucho la atención aunque hay cierto tipo de libros de este ambiente que sí me gustan pero no quiero tener que leer más para conocer el entorno y los personajes. Ahora mismo no me lo llevo, estoy en otro tipo de lecturas y lo reconozco, también busco las que me resultan más cómodas.
ResponderEliminarBesos
¿Por qué están descatalogados? :-((( Es que no lo entiendo. Igual que con los libros de Flavia de Luce, que son un tesoro y también desaparecieron fugaces, ¡qué maldad! Me gusta mucho Agatha Raisin, pero solo he leído los dos primeros y entre todo lo que tengo pendiente y que están difíciles de encontrar... me desanimas. Y eso que me ha encantado lo del veterinario que odia a los gatos y los perros, jajajajaja. Besos.
ResponderEliminarYo también empezaría por el principio, gracias por la recomendación!
ResponderEliminarBesitos
No ho sé, me dejas indecisa. Por lo que cuentas, la trama da un poco igual, y por lo que más me llama la atención es por lo peculiar que es la protagonista. Mi problema es que no estoy segura de lograr comprenderla y que no me parezca demasiado...demasiado. Lo pensaré.
ResponderEliminarUn saludo,
Laura.