jueves, 26 de marzo de 2020

RESEÑA (by MH) ::: EL PRIMO HENRY - Anthony Trollope





Título original: Cousin Henry 
Autor: Anthony Trollope
Editorial: Belvedere
Traducción: Miguel Ángel Pérez Pérez 
Páginas: 224
Fecha publicación original: 1879
Fecha esta edición: noviembre 2017
Encuadernación: rústica con solapas
Precio: 17,50 euros 
Imagen de cubierta: Portrait of the artist (1800, John Vanderlyn)



Indefer Jones es un anciano terrateniente que ve próxima su muerte. El testamento, tras haberlo modificado varias veces a causa de sus dudas, ya lo tiene redactado y lacrado. Las dudas vienen marcadas por el deseo de que sus propiedades pasen a manos de su sobrina, Isabel Brodrick, la cual es respetada y querida por todos los arrendatarios, pero la tradición inglesa establece que las tiene que heredar el mayor de los varones de la familia, que no es otro que el apocado e impopular Henry Jones, su otro sobrino. Tras rehacerlo en sucesivas ocasiones, en sus últimos días redacta uno en secreto y lo guarda sin decir a nadie donde lo ha hecho. Bajo la continua sospecha de que existe un testamento diferente, el notario no descansará hasta dar con él y, por ende, con el verdadero heredero.

La de tiempo que llevaba El primo Henry guiñándome el ojo desde la estantería mientras yo me hacía la interesante... y eso que adoro a Anthony Trollope, pero en España se publica tan poquito suyo que voy racionando con paciencia lo que va saliendo. En cualquier caso ya era hora de que el flirteo llegase a su fin y de ponerse manos a la obra :)

Indefer Jones es un terrateniente ya anciano que vive feliz con su sobrina, Isabel Brodrick, la luz de sus ojos... pero Indefer tiene un problema: su testamento. Su propiedad, Llanfeare, ha ido pasando generación tras generación a un descendiente varón, pero más por tradición que por ley, puesto que no existe ninguna cláusula vinculante que obligue a ello. Y ahí reside el problema que trae por la calle de la amargura a Indefer desde hace años: si se deja llevar por el corazón, la propiedad debería pasar a Isabel, a la que no solo adora, sino que es conocida y muy querida por todos los arredentarios y sería la mejor dueña que Llanfeare podría tener... pero su cabeza le dice que, por tradición, la propiedad debería pasar al varón correspondiente en la línea de sucesión, Henry Jones, a quien no soporta y que cuando visita Llanfeare apenas muestra interés por las tierras y quienes las arrendan. Indefer Jones ha cambiado el testamento múltiples veces a lo largo de los años, y el último, el definitivo, lega en favor de Henry Jones y deja sin nada a Isabel (por múltiples razones que no vienen al caso)... pero ya en su lecho de muerte, dice unas últimas palabras que hacen pensar a Isabel que hay un testamento posterior, uno diferente redactado en su ausencia... un testamento sobre el que ella decide guardar silencio, que debe estar escondido en alguna parte y cuya localización seguramente solo conoce su primo Henry.

El primo Henry es una novela de personajes, no de trama, y eso es algo que debe tener muy claro quien se acerque a ella. El leitmotiv de la historia está claro desde el principio (un testamento perdido, un personaje que sabe dónde está escondido y duda sobre qué hacer con esa información, y otro personajes que sabe que existe ese testamento pero que por testarudez no lo dice), y a partir de ahí nos adentramos en las cabezas de los personajes y asistimos a sus idas y venidas, sus motivaciones, sus dudas, las decisiones que toman en consecuencia y las repercusiones de esas decisiones.

Por un lado tenemos a Indefer Jones, la indecisión hecha persona, que no es capaz de plantarse en una postura y atenerse a ella. El pobre sufre mucho por estos quebraderos de cabeza, pero solo se puede culpar a sí mismo y a su carácter inseguro e irresoluto, porque nadie intenta influenciarle en un sentido u otro. En cualquier caso no me ensañaré con él porque sin todas esas vacilaciones no tendríamos libro. Luego tenemos al primo Henry que da título a la novela. Henry es un cobarde temeroso que sufre el desprecio de todo el mundo en Llanfeare y alrededores; sabe dónde está el testamento, pero también sabe que si aparece se quedará sin herencia, y duda sobre qué hacer con él, si quedar como un héroe revelando su paradero o dejar que lo encuentren por sus propios medios. Henry es tan insulso que ni siquiera es un malo redomado de estos que encienden al lector; no tiene malicia (si la tuviera haría las cosas de una manera totalmente distinta): simplemente es un pobre hombre, y actúa en consecuencia. Y luego tenemos a Isabel, sobrina del difunto Indefer Jones y prima del consabido Henry... Isabel sabe que hay otro testamento a su favor escondido en alguna parte de la finca, pero odia tanto a Henry, odia tanto la mera idea de obtener una sola libra gracias a él o a cualquier acto suyo, que prefiere renunciar a todo, cual mártir de la causa, antes que desvelar que sabe a ciencia cierta que hay otro testamento. Orgullosa, egoísta, tozuda y autoproclamada víctima, Isabel, por méritos propios, no cae mucho mejor que su primo.

Dicho todo esto resulta evidente que ninguno de los personajes principales logra que el lector empatice con ellos, pero eso no debe tomarse como algo malo; al contrario, a mí me ha parecido muy realista. La mente humana es muy complicada y los héroes y villanos absolutos no tienen cabida en esta historia. Ya sea, en el caso de Henry, por su cobardía y pusilanimidad, o en el caso de Isabel, porque va de mártir y se regodea en la sensación que eso le produce, lo cierto es que los dos podrían hacer las cosas muy diferentes y no las hacen, y el lector no puede evitar reprochárselo. Quizás (seguro) el personaje que mejor me ha caído es el abogado que se hace cargo del testamento, Apjohn, que tiene muy claro que hay otro posterior, que quiere encontrarlo porque está seguro de que será a favor de Isabel (y él quiere que Llanfeare sea de Isabel), así que se pone manos a la obra y actúa toda la novela en consecuencia como un terrier que no suelta su presa. Es el único personaje resolutivo y que actúa siempre con un fin (un fin que además es totalmente altruista, porque él no gana ni pierde nada en el asunto) y el lector se lo agradece en comparación con las actitudes de los otros dos (muy diferentes entre sí, en circunstancias muy diferentes también, pero ambas igualmente egoístas, vacilantes y timoratas).

Por cierto, que me ha resultado también muy llamativa la crítica nada velada que Trollope lanza contra los medios de comunicación y el poder que tienen para jugar con la vida de las personas sin miramientos ni remilgos. En la novela vemos como cierto periódico pone en circulación información no contrastada para apalear y hundir socialmente a un personaje. Que esa información sea verídica o no es lo de menos, lo importante es el uso que se hace de ese poder para manipular la opinión pública. Imaginaos lo que pensaría Trollope si tuviese una ventana desde la que observar una sociedad de la información como la nuestra, totalmente carente de escrúpulos, corrupta en algunos casos, amarillista en muchos, donde la información vuela en segundos a todo el planeta, sea cierta o no, manipulando las corrientes de opinión. Aporrearía la máquina de escribir hasta que se le cayesen los dedos.

El primo Henry es, en definitiva, un libro donde lo que importa, lo que se exprime y lo que se disecciona es la mente humana puesta a prueba ante una situación muy concreta y particular, y donde Trollope, que era un genio a la hora de otorgar individualidad y dimensionalidad a sus personajes, pone sobre la mesa la imperfección del género humano y todas sus carencias y flaquezas. Unas veces entiendes las dudas y decisiones que toman los personajes; otras veces te enfadas con ellos por la forma tan particular que tienen de afrontarlo todo. El premio final es una historia tan bien escrita, con unas personalidades tan bien definidas y diferenciadas, que cuando el lector se pregunte diez años después de qué iba el libro y lo que ocurría en él, se acordará sin ninguna duda.

De Anthony Trollope tengo otro par de libros más sin leer en la estantería (Ojo por ojoEl mundo en que vivimos). Dejaré pasar otra vez un tiempo antes de ponerme con uno de ellos... pero tampoco mucho :)



Anthony Trollope nació en Londres en 1815. Su infancia no fue de las más felices porque su padre, el abogado Thomas Trollope, tuvo durante mucho tiempo grandes problemas económicos y su madre, la escritora Frances Stapleton, en 1827 se fue a EE. UU. para unirse auna comunidad utópica y dejó a Anthony solo en Inglaterra. A su vuelta de América, Frances, más conocida como Fanny Trollope, publicó el libro Domestic Manners of the Americans, un fuerte ataque a las costumbres y a la sociedad americana, que se convirtió enseguida en un bestseller. A pesar del éxito del libro, la familia siguió en dificultades y tuvo que marcharse a Bélgica para huir de los acreedores. 

Trollope volvió a Gran Bretaña, donde encontró trabajo como funcionario de Correos y, durante sus largos viajes en tren como inspector postal, empezó a escribir sus primeras obras inspiradas en las cartas perdidas. La fama la alcanzó con la novela The Warden (1855), primera de las seis novelas situadas en el imaginario condado de Barsetshire. Después de una exitosa carrera en Correos y de intentar sin suerte la carrera política, se dedicó exclusivamente a la literatura: su producción consta de más de cincuenta obras, entre las cuales destacan las novelas «políticas» o llamadas el ciclo «de Palliser» en las que a su habitual humor asocia una crítica a la hipocresía y a la ausencia de auténticos valores morales en la sociedad victoriana. Murió en Londres en 1882 y fue enterrado en el Kensal Green Cemetery al lado de su contemporáneo Wilkie Collins.

17 comentarios:

  1. Por lo que nos cuentas en tu reseña son unos personajes que merece la pena conocerlos. No soy de los lectores que se llevan un fiesco si no empatizo con ellos, lo que me interesa es que estén bien construidos y sus actos sean verosímiles. Acabo de leer la sinopsis de Ojo por ojo y tomo también nota de esta novela. Besos.

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  2. Uy, aquí damos en hueso. La verdad es que de Trollope leí uno, de la editorial Dépoca y pinché, era el de Antonia. No pude con él, vamos que lo terminé y todo pero me aburrió soberanamente, me parece que me faltó trama. Y aquí igual un poco de lo mismo. Me refiero a que como dices lo de centrarse en los personajes, para mí no es suficiente en este caso. Cuando leo de esta época lo que me gusta es que haya mucho tejemaneje.
    En este caso, lo dejo pasar.
    Besos

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  3. Yo he leído uno de este autor y no creas que me entusiasmó, ni recuerdo el título en este momento.Me pasó como a Nora, me aburrí un poquillo.
    Besos

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  4. Parece que tiene muy buena pinta así que me lo apunto en mi lista de clásicos y a ver qué tal. No he leído nada del autor todavía así que sería una buena opción para iniciarme. Gracias por la reseña

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  5. Hola, pues yo me lo llevo sin dudar porque El mundo en que vivimos me encantó y quiero seguí con el autor. Besinos.

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  6. Pues me dejas con ganas de conocer a estos personajes, sin duda. Otro libro que tendré apuntar en mi infinita lista de pendientes.
    Besotes!!!

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  7. ¡Uno de mis pendientes! Desde que lo vi en casa de una amiga no pienso en otra cosa que leerlo, pero lo que es la vida o la memoria ¡No lo tuve en cuenta cuando hice la lista para el reto! ¿Porqué? Atontá por la vida que va a una 😂😂😂 Y claro, ahora ya el ansia me puede ¿Se puede una saltar el confinamiento para ir a por un libro? Yo lo veo de primera necesidad, vamos...

    ¡Genial reseña!
    Besukis Pitufina 💋💋💋

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  8. No me he estrenado con este autor, pese a que está en mi lista desde hace milenios casi..
    Espero ponerle remedio pronto, gracias por tu reseña!
    Besotes

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  9. Hola guapa, de Trollope tengo en el kindle La señorita McKenzie, y lo creas o no, no lo he metido en el reto,jeje... Pero tengo ganas de ponerme con él, porque me gustó mucho la historia corta que leí en Cuentos de Navidad...
    un besazo

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  10. Estoy empezando a agobiarme viendo la cantidad de clásicos no ya que tengo pendientes de leer, sino que ni siquiera conozco ¡qué desastre!
    Besos.

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  11. No lo he leído, pero me crea curiosidad. Otro que apunto. Un beso.

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  12. Tomo nota de este novela de Trollope, no la conocía pero me parce muy interesante lo que nos cuentas. Besos

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  13. Buenaas!
    Pues no lo conocía pero por lo que cuentas es un libro que tengo que leer ^^
    Gracias por la reseña <3

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  14. Ummm no sé, no sé,... Con este no me tientas especialmente. Besos

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  15. Buenas noches, MH:
    Tenía ganas de conocer tu opinión con respecto a esta obra de Trollope, porque para mí es muy distinta de las que he leído hasta la fecha. Comparto contigo la opinión con respecto a los personajes, son antipáticos hasta la médula. Al igual que me declaro a favor del realismo de la historia que plantea Trollope, como bien argumentas tú. Para mí esta novela es de lo mejor que he leído del autor, en cuanto a audacia narrativa. Eso sí, mi favorita será siempre, por temas personales, El doctor Thorne (la novela, no la adaptación).
    Un abrazo, y enhorabuena por otra reseña estupenda!!
    PD: Cuídate mucho!!

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  16. ¿La editorial Belvedere ha desaparecido? Las últimas veces que entré en su web no estaba actualizada. Yo también tengo pendientes los mismos que tú. Miraré a ver si consigo este libro.

    Gracias por la reseña.
    Besos.

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  17. ¡Holaaaa! No he leído nada de este autor, es de mis pendientisimos... no sé si esta novela que reseñas es la mejor para empezar con este autor, lo que es la premisa me llama mucho la atención así que voy a tomar nota del título. Un saludo!

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