lunes, 4 de octubre de 2021

RESEÑA (by MH) ::: EL PAGARÉ - Francis Scott Fitzgerald


 
 
Título original: The I.O.U.
Autor: Francis Scott Fitzgerald
Editorial: Nórdica
Traducción: Blanca Gago
Páginas: 64
Fecha publicación original: 2017 (escrito en 1920)
Fecha esta edición: septiembre 2021
Encuadernación: rústica con solapas
Precio: 9,95 euros
Ilustración de cubierta: Seth, para The New Yorker (edición del 20 de marzo de 2017)



El pagaré es un divertídisimo relato sobre el sector editorial que critica la búsqueda sin escrúpulos de historias sensacionales con criterios exclusivamente comerciales. Escrito en 1920, cinco años antes de la publicación de El gran Gatsby, «El pagaré» es un relato que permanecía inédito. En 2017 The New Yorker lo descubrió y publicó. Iba a ser publicado en Harper’s Bazaar, pero Francis Scott Fitzgerald nunca lo envió para su publicación. Narra la historia de un editor que acaba de contratar un exitoso libro, las memorias de un médico convertido en investigador de fenómenos paranormales. Después de un exitoso lanzamiento de medio millón de copias, el editor decide visitar al autor para firmar su próximo libro… La ilustración de cubierta es del gran dibujante Seth.

Este relato llegó a mis manos hace poquitos días como regalo de una amiga, y era tan breve y me apetecía tanto leerlo que ha sido visto y no visto. Hoy la reseña va a ser muy corta porque si a que se lee en apenas quince o veinte minutos se suma que apenas se puede hablar de su contenido sin desvelar más de la cuenta, cuanto menos se escriba menos posibilidades hay de irse de la lengua.

El pagaré es un relato inédito de Francis Scott Fitzgerald escrito allá por 1920 pero descubierto en 2012 y publicado por The New Yorker en 2017. Al parecer la intención de Fitzgerald era que fuese publicado en Harper's Bazaar pero nunca llegó a enviar el manuscrito. Al menos esto es lo que reza la sinopsis, pero claro, a mí me surgían muchas preguntas que no se explican ahí: ¿dónde fue hallado el relato? ¿Cómo sabían que era de Fitzgerald? ¿Cómo sabían dónde quería publicarlo? ¿Cómo sabían que nunca lo mandó? Y me he puesto a indagar, y ya que lo he averiguado os lo cuento y así no lo tenéis que buscar vosotros :)

Resulta (resultaba) que Fitzgerald escribió El pagaré a finales de la primavera de 1920, cuando apenas tenía 23 años, a petición de Henry Blackman Sell, editor de Harper's Bazaar. A pesar de su juventud Fitzgerald ya estaba empezando a saborear las mieles de la fama (ya había publicado su primer libro, A este lado del paraíso), y de ahí que recibiese encargos de este tipo y fuera ya muy conocido dentro del mundillo literario. El caso es que lo escribió y lo dejó en la oficina que Harold Ober, su agente, tenía en Nueva York, recordándole que era el relato que le habían pedido los de Harper's Bazaar. Ya en julio el propio Ober (el agente) lo envió al Saturday Evening Post, pero Fitzgerald le pidió que se lo devolviese porque quería revisarlo. Ober recuperó el manuscrito, le envió el texto escrito a máquina a Fitzgerald... y nunca más se supo, porque el autor estaba totalmente inmerso en la escritura de su novela Hermosos y malditos (que publicaría en 1922) y se olvidó del relato. El pagaré permaneció en manos de los administradores del legado de Fitzgerald hasta que fue redescubierto y vendido a la Biblioteca Beinecke (de libros raros y manuscritos) de la Universidad de Yale en 2012. Finalmente apareció publicado junto a otros muchos relatos y cuentos inéditos del autor, en una antología publicada en 2017 llamada I'd Die For You: And Other Lost Stories.

Dicho esto, el relato está narrado por un editor que no quiere darnos su nombre y que nos confiesa que, obviamente, él tiene que alimentar a su familia y que más vale libro malo que venda mucho que libro bueno que no venda un carajo. Nos habla de la nueva sensación de su editorial, el doctor Harden, investigador de fenómenos paranormales que dice haberse comunicado con su sobrino muerto y que ha plasmado su experiencia en un libro, La aristocracia del mundo espiritual. La primera edición consta de trescientos mil ejemplares, se vende como churros, y el editor decide atar en corto al escritor para otros cinco años. Cuando se dirige en tren a la localidad donde vive el doctor Harden es cuando cambia todo... No, no os he dicho nada, todo esto ocurre en las primeras cinco páginas del relato. A partir de ahí es cuando ya no se puede (no se debe) abrir el pico.

Todos los columnistas y comunistas -nunca he logrado entender ninguna de esas dos palabras con claridad- despotrican de mí porque dicen que lo único que me importa es el dinero. Es verdad, me importa muchísimo. Mi mujer lo necesita y mis hijos no dejan de gastarlo. Si me ofrecieran todo el dinero que hay en Nueva York, no lo rechazaría. Prefiero sacar un libro con una preventa de quinientos mil ejemplares antes que descubrir a un Samuel Butler, un Theodore Dreiser y un James Branch Cabell en el mismo año. A ustedes les pasaría lo mismo si fueran editores.

Me ha gustado muchísimo la sorna que destila el relato y la ironía con la que describe "cómo se cuece un libro" antes de que salga a la venta. Las primeras diez-quince páginas son simplemente geniales, no sobra ni falta una palabra, cada frase está medida para lanzar la pulla y la crítica, el ritmo de la narración es vibrante y la imagen que queda en la retina del lector es totalmente entusiasta. A partir de cierto momento la sorna sigue presente, el sarcasmo también, pero orienta su foco de atención hacia algo muy diferente de las editoriales y sus intereses. ¿De qué os hablo? Pues no os lo puedo decir salvo que la crítica se torna social y humana y nos lleva por derroteros inesperados al comienzo del relato. Fitzgerald no da puntada sin hilo y, como suele pasar en este tipo de historias tan breves con un gran escritor detrás, le da tiempo a decir todo lo que quiere decir y además a hacerlo bien. Sé que muchos lectores no son muy amigos de los relatos, pero es que hay relatos y relatos :)

La edición no está ilustrada en su interior, pero la ilustración de la cubierta (obra de Seth, dibujante canadiense) es la original de marzo de 2017 que usó The New Yorker cuando publicó el relato. Si sois como yo, coleccionista de libros clásicos sobre libros, librerías, escritores, editores, editoriales, bibliotecas, etc... El pagaré es una magnífica adquisición. Pero es que además el relato merece mucho la pena, se lee con una sonrisa perenne (sobre todo en la primera mitad), y es una muestra más del Fitzgerald escritor que ya ofrecía destellos de genio varios años antes de su Gatsby (el Fitzgerald ser bumano es otro tema que no se debate aquí). Encantada estoy con mi regalo y muy agradecida :)

 
Francis Scott Fitzgerald (Saint Paul, 1896 - Hollywood, 1940). Considerado uno de los más importantes escritores estadounidenses del siglo xx y portavoz de la «Generación Perdida». Su obra refleja el desencanto de los privilegiados jóvenes de su generación, aquellos norteamericanos nacidos en la última década del siglo xix, a quienes les tocó madurar durante la Primera Guerra Mundial y que arrastraban su lasitud entre el jazz y la ginebra. Sus obras están escritas con un estilo elegante y situadas en fascinantes decorados. Destacan A este lado del paraíso (1920),  Suave es la noche (1934) y, por supuesto, El gran Gatsby (1925).

13 comentarios:

  1. Me encantan los relatos y como estoy en pecado porque todavía no he leído nada del autor creo que sería perfecto como primer acercamiento.
    Un beso y gracias por la reseña.

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  2. Qué puedo decir mas que me has convencido totalmente... Vengo de dejarme un dineral en la feria, pero no dejo de comprar. ;-)

    Besos!

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  3. Tengo en mi estantería de pendientes A este lado del paraíso desde hace años. He leído tres novelas de Ftzgerald y las tres me han gustado mucho por lo que no sé por qué se me resiste ese título. A ver si con este recuerdo cae por fin.
    Este relato tiene una historia de lo más interesante así es que lo anoto también.
    Un beso.

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  4. Hola MH, al final le voy a coger gusto a los relatos, al terror y, por supuesto, ya le he cogido gusto a los clásicos. Con decirte que de los cinco libros que compré en la FLM cuatro eran clásicos...
    En fin que me has picado y lo miraré.
    El gran Gatsby lo tengo en casa ilustrado por Fernando Vicente... Este para el reto e año que viene... (ya te estoy presionando)
    Un besazo

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  5. Holaaaaa.
    Me encanta!! Jo, me había hecho ilusiones al ver la portada de que estaría ilustrado. Es tan preciosa. Me parece una monería genial para regalo. Y el relato. Que también me encantan de libros, libreros, escritores y toda esa fauna. Una pena que sea cortito. Me gusta ese que trae todos los cuentos. Me lo estaba pensando cuando salió. Este año me estrené con el Gran Gatsby y me ganó por la mano.
    Apuntadísimo.
    Besos

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    1. Me ha pasado como a Norah, que también pensaba que podía estar ilustrado.. buahhhhh... Pero bueno, pinta genial igualmente. Me gusta el género y el autor, así que lo anoto. Besos

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  6. Buenas tardes, MH:
    Hoy he pasado por encima. Tengo el libro en casa desde la feria y, como es tan breve, no quiero saber nada sobre él. Prometo darte feedback de mi lectura en cuanto lo disfrute.
    Un abrazo y muy feliz comienzo de semana!!

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  7. ¡Hola! Tengo pendiente a este autor y creo que leer esta lectura cortita, podría ser un muy buen comienzo para conocer más de su obra. Muchas gracias por la reseña. ¡Un besito!

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  8. Qué bueno leer cuánto lo has disfrutado aunque ahora mismo no es lo que leería nunca se sabe más adelante

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  9. Hola, del autor solo he leído El gran Gatsby y aunque tengo pendiente continuar con él, siempre se me cruzan otros escritores y va quedando atrás. La edición de este relato es muy chula y al ser tan breve, seguro que puedo intercalarlo en algún momento. Me lo llevo apuntado. Besos.

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  10. ¡Ohhh! Me encanta!! No sabía que Fitzgerald tenía esa vena cómica y que era tan valiente como para entrar a reírse un ratito con un editor (no me atrevo a decir "de"). Me lo llevo. Besos.

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  11. Me apetece un montón leerlo. Scott Fitzgerald es uno de mis autores preferidos. Su vena cómica como dice Mónica no la conozco. Voy directo a por él.
    Muchos besos

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  12. No soy muy de relatos cortos porque me saben a poco, pero has logrado despertar mi interés por la crítica que contiene este. Además, me ha encantado conocer la historia de su origen. Tomo nota por si lo veo en la biblioteca.

    Un saludo,
    Laura.

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