Título original: Reinas de la carretera
Autora: Pilar Tejera
Editorial: Casiopea
Páginas: 300
Fecha de publicación: noviembre 2018
Encuadernación: rústica con solapas
Precio: 18 euros Diseño de cubierta: Anuska Romero
La carretera, o los caminos de principios del siglo XX, deberíamos
decir, fueron parte importante de los escenarios elegidos por la mujer
en su lucha por la igualdad. Expresiones del tipo: «la primera mujer
en…», fueron cada vez más habituales en récords asociados a la aventura,
los viajes y la competición: Annie Londonderry que en 1895 dio la
vuelta al mundo en bicicleta, Effie Hotchkiss cruzando los EE. UU en
moto en 1915 con su oronda madre encaramada en el sidecar, Anita King,
la estrella del cine mudo que atravesó los EE.UU en solitario al volante
de un automóvil y tantas otras, están recogidas en este libro dedicado a las sufragistas y pioneras de la aventura que con sus bicicletas, sus motocicletas y sus flamantes automóviles pusieron a prueba los límites de su resistencia y libraron su peculiar batalla a favor de la igualdad de la mujer en una época en que la vida transcurría en Blanco y Negro.
Así que, si en pleno siglo XXI nos persigue el estigma de que las mujeres no sabemos conducir, o que siempre conduciremos peor que los hombres, ¿sois capaces de imaginar cómo fue la irrupción de la mujer en la conducción hace 150 años? Porque significó una auténtica revolución social, y las mujeres tuvieron que aguantar mucho, muchísimo, para ejercer su libertad a ponerse al mando de un vehículo y demostrar que estaban igual de capacitadas que los hombres en una sociedad y una época en la que las mujeres no tenían apenas derechos salvo los de casarse, tener hijos y cuidar de su hogar. Por eso, la sociedad en general se llevaba las manos a la cabeza... ¿dónde irán todas esas mujeres montadas en una bicicleta?
Reinas de la carretera está dividido en tres partes naturales en cuanto a cronología. La primera, Una tetera en el manillar (título genial se mire por donde se mire), narra el comienzo de los comienzos: la bicicleta y su uso como vehículo de independencia para la mujer y simbolo de las reivindicaciones en pro de la igualdad que ya pisaban fuerte en Estados Unidos y Europa durante la segunda mitad del siglo XIX; la segunda parte, El mundo por «motera», ya nos adentra en las primeras décadas del siglo XX y el paso de las bicicletas a las motocicletas, y con ello descubrimos a numerosas aventureras ávidas por descubrir el mundo, sin miedo a nada, que montadas sobre sus motos recorrieron las carreteras de medio planeta en viajes plagados de anécdotas e incidentes que maravillaban a medio mundo; la tercera parte, Reinas de la carretera, ya nos sube a bordo de los automóviles y en ellos seguimos recorriendo el mundo acompañando a auténticas pioneras que se pasaron las críticas y los desprecios por el arco del triunfo y pasaron a la historia, al igual que sus predecesoras, por su valentía, arrojo y determinación.
El modo en que están presentadas todas las partes es el mismo, y aunque conocemos en cada momento de manera general la situación de la época, Pilar Tejera incide sobre todo en mujeres concretas, figuras determinadas e individuales con nombres y apellidos que, por una causa u otra, pusieron su granito de arena en la causa del manillar y el volante. No es un ensayo sobre las reinas de la carretera en general, es un ensayo sobre reinas de la carretera muy concretas que marcaron la diferencia. Un homenaje a cada una de ellas apuntándolas con el dedo en representación de tantas otras que siguieron sus pasos y se atrevieron a desafiar ya no solo lo que se esperaba de ellas, sino las numerosas piedras del día a día que se iban encontrando en el camino.
Y es que esos son detalles en los que no solemos caer cuando pensamos en pioneras del siglo XIX, solos nos quedamos en las gestas... pero haceos una idea. ¿Tenéis una imagen mental de la moda de la época, de la ropa que llevaban las mujeres? Corsés que no dejaban respirar, faldas de metros y metros hasta los tobillos... llevaban kilos y kilos de ropa encima para sus tareas diarias que apenas les dejaban moverse. Pues imaginad todo eso haciendo deporte sobre una bicicleta y las faldas enganchándose en las ruedas y las cadenas. Así que no solo se sobrepusieron a los insultos, las humillaciones, a ser objeto de burlas y ridículo... sino que tuvieron que ir adaptando su día a día, la moda, el vestuario, las costumbres, para ir mejorando sus posibilidades y comodidad a bordo de un vehículo.
La invención de los bombachos, del limpiaparabrisas o el espejo retrovisor pertenece a mujeres; vueltas al mundo en bicicleta ganando apuestas; viajes cruzando continentes a bordo de una bici, moto o coche (en muchas ocasiones solas y haciéndose cargo ellas mismas de los problemas mecánicos de los vehículoso, a veces echando uso exclusivamente de imaginación y sentido común); mujeres que empezaron a competir en pruebas exclusivas de hombres de manera profesional a bordo de una bicicicleta... Puede parecer un mensaje manido, pero muchas de las cosas que hoy en día damos por hechas solo existen porque hace muchos, muchos años, otras mujeres decidieron enfrentarse a toda una sociedad y un orden establecido para que las mujeres pudiesen acceder a un mundo más allá del hogar, y lo hicieron en una época en la que era como luchar contra molinos de viento y hacían falta mucha determinación y valentía para no sucumbir a los innumerables obstáculos, humillaciones y condescendencias varias del camino.
La edición viene acompañada de numerosa e ilustrativa documentación fotográfica, ya sean imágenes generales de la época o fotos que ponen cara a muchas de las mujeres de las que acabamos de conocer su historia. La única pega que debo ponerle si soy totalmente honesta es la necesidad que tiene el texto de una corrección porque hay muchas erratas, pero más allá de eso, Reinas de la carretera es una lectura imprescindible ya no solo para conocer de primera mano la historia de muchas de las mujeres que han hecho posible que hoy en día otras mujeres vayamos al volante de nuestros coches, sino que esas mismas historias, por sí solas, resultan apasionantes. Te las imaginas a bordo de sus bicis, motos o coches cruzando desiertos, carreteras, países y continentes como las aventureras idealistas que fueron, y te dan ganas de coger el coche y salir zumbando para no volver en unos cuantos meses... aunque estoy segura de que, teniendo muchas más facilidades como tenemos hoy en día, nos las apañaríamos mucho, mucho peor.
Yo no voy a dar nombres concretos de ninguna de las mujeres que aparecen individualizadas a lo largo de la narración porque no quiero resaltar a ninguna por encima de las demás. Baste decir que fueron mujeres que pertenecieron a una época en la que convivían rasgos tan típicamente victorianos como viajar bien abastecidas de té a todas partes (lo de la tetera en el manillar no es una exageración) con la osadía rebelde de vestir pantalones y llegar con la cara desollada por el sol a su destino tras meses de viaje por carretera cumpliendo sueños y derribando barreras y prejuicios. Hicieron historia, y lo menos que podemos hacer es conocerlas y ponerles nombre. Bien merecido lo tienen.
Pilar Tejera es historiadora y ha estado vinculada a la comunicación y
al periodismo de viajes durante dos décadas. En 2008 crea la comunidad www.mujeresviajeras.com y el sello editorial Ediciones Casiopea, dando respuesta a la demanda de títulos protagonizados por mujeres.
Me parece un libro interesantísimo, la verdad. Son cosillas que nunca pensamos pero que tienes razón, si hoy podemos conducir es porque hace muchos años una mujer dijo "quiero conducir" y lo hizo. Sí, este libro para a mi lista.
ResponderEliminarNo tiene mala pinta, sobre todo por saber más sobre estas mujeres que hicieron historia.
ResponderEliminarBesos
Jo pues me encanta lo que cuentas. Disfruto mucho leyendo vuestras reseñas cuando traéis libros de este tipo desconocidos y muy curiosos. Me lo llevo apuntado.
ResponderEliminarBesos
Desde luego se ve interesante y la reseña lo hace muy apetecible, pero ahora mismo busco otro tipo de lecturas.
ResponderEliminarBesos.
Hola guapa, me encanta ver estos libros, me pican la curiosidad, peeeeero... luego se quedan en mi lista de deseos sin llegar a ellos. Voy a hacer un esfuerzo a ver si este no se me pasa. jeje...
ResponderEliminarUn besazo
Me parecen apasionantes este tipo de historias! Y es lo que tú dices, qué valentía conseguir lo que consiguieron en aquella época...cuando aún hoy en día tenemos que aguantar muchos prejuicios por ser mujeres conductoras.
ResponderEliminarA pesar de las erratas, yo lo leería seguro. Me encantan estas historias.
Besitos
Tiene una pinta excelente, desde luego. Hay mucho viejo tocapelotas que sí he notado hacen lo de "pasa, pasa", no vaya a ser que los atropelles porque no sepas acelerar o frenar a tiempo...
ResponderEliminarSí me gustaría descubrirlo y lo voy a anotar, pero no garantizo que lo compre. Me gustaría hojearlo antes en la librería.
Besos.
Nunca me he percatado de esas reuniones para ver si la lía, ahora me fijaré. Madre mía, ella gente está fatal.
ResponderEliminarNo me cabe duda de que son historias muy interesantes y se les debe mucho. Que parece que lo que tenemos ahora es todo así, como caído del cielo y además también sirve para ver que sí se avanza. La parte más entretenida tiene pinta de ser la primera con las bicicletas y aquellos estilismos imposibles. La más entretenida creo que la segunda.
Lo dejo para ver si se animan en la biblio.
Besos
Me encantan los libros de esta editorial... la mujer es protagonista indiscutible en todos sus títulos...
ResponderEliminarYo el que tengo es "Viajeras de leyenda. Aventuras asombrosas de trotamundos victorianas". No lo he comenzado pero tiene una pinta espectacular... Me gustan mucho los que tienen de "Todos los camninos van a ....."
Interesante, muy interesante...
Uuuuf, menos mal!!! Este no me atrae mucho ¡Qué alivio! 😅 Si cae en mis manos, bien, y si no podré vivir con ello 😌
ResponderEliminarBesitos carinyet 💋💋💋
Hola. Qué apetecible el libro, me gustaría tenerlo ya mismo. Gracias por todo lo que nos habéis contado sobre él.
ResponderEliminarBesos.
Un libro muy interesante, sin duda. Lo que tendrían que aguantar estas mujeres en su época... Como lo encuentre en la biblioteca, me lo llevo.
ResponderEliminarBesotes!!!
Una propuesta muy interesante y que no conocía. Me encantan las historias con mujeres como protagonistas, gracias por el descubrimiento.
ResponderEliminarBesos
Qué curiosidad tan curiosa. Tomo nota, y en especial para un par de regalos. Un besote!!
ResponderEliminarMira, entre los bombachos y eso de "una tetera en el manillar", y que tú me lo has recomendado, me muero de ganas de leerlo. Además es que me recuerda a "Damas en bicicleta", de F.J. Erskine (Impedimenta) del que guardo tan grato y feliz recuerdo que... Nada, lo dicho, que tengo muchas ganas de leerlo!! Besos.
ResponderEliminarCómo pinta esta propuesta, me la llevo pero ya. Besitos
ResponderEliminarA mí esta propuesta me parece de lo más tentadora. Ya cuando vi la publicación me llamó muchísimo y la reseña me ha dejado más interesada si cabe.
ResponderEliminarBesos
Una reseña muy interesante de un libro que no conocía, aunque no es una lectura para mi moment actual. Pero me la apunto.
ResponderEliminarUn beso ;)
Me parece importantísimo recuperar la historia de estas mujeres avanzadas a su época y que, como tantas, han sido anónimas durante mucho tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo
Que a través de los libros podamos conocer mujeres como las que se recogen en este volumen no solo me parece importante sino necesario. Te confieso que me llegó información de este libro pero, con tanto ajetreo, no le presté mucha atención la verdad. Ahora sí que tomo nota. Besos
ResponderEliminarUn libro curioso, sin duda, pero no me parece el tipo de lectura que cogería, demasiados datos
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