Título original: La librería de Michelle
Autora: Verónica Fernández
Editorial: Espasa
Páginas: 288
Fecha de publicación: mayo 2017
Encuadernación: rústica con solapas
Precio: 5,95 euros Encuadernación: rústica con solapas
Ilustración de cubierta: Marta R. Gustems
Verano de 1977. Jaime Olalla, un tímido adolescente amante de
la literatura y el cine, regresa a su pueblo después de pasar el año
estudiando en los jesuitas de Burgos. En septiembre se mudará a Madrid
para empezar la carrera de Medicina. Suárez acaba de tomar posesión, el
país despierta como puede de su letargo mientras en la radio triunfan a
partes iguales Rafaella Carrá y Jarcha.
Michelle, una enigmática francesa, hija de emigrantes españoles, llega a Vinuesa con una furgoneta cargada de libros con la intención de abrir una librería en la antigua taberna de su abuelo. Michelle contrata a Jaime como dependiente y convierte su negocio en un lugar donde se dan clases de francés, se lee poesía, se habla de política, se pintan pancartas y se sueña.
La librería de Michelle cuenta la educación sentimental de Jaime, pero también el retrato de un momento de cambio en España, con sus luces y sombras, vibrante y profundamente estremecedor.
Michelle, una enigmática francesa, hija de emigrantes españoles, llega a Vinuesa con una furgoneta cargada de libros con la intención de abrir una librería en la antigua taberna de su abuelo. Michelle contrata a Jaime como dependiente y convierte su negocio en un lugar donde se dan clases de francés, se lee poesía, se habla de política, se pintan pancartas y se sueña.
La librería de Michelle cuenta la educación sentimental de Jaime, pero también el retrato de un momento de cambio en España, con sus luces y sombras, vibrante y profundamente estremecedor.
De lo que habíamos heredado de nuestros progenitores, él se había quedado con la altura de mi padre y el don de gentes de mi madre; yo, con la cobardía del primero y la delgadez de la segunda. No era justo. Nada se podía hacer por equilibrar una balanza tan desequilibrada.Jaime Olalla y Moi Sangüesa por fin dan carpetazo a su internado de Burgos. Ha llegado el verano, han finalizado su secundaria (en aquellos tiempos su COU) y les queda un largo y no tan tórrido verano en el pueblo soriano de Vinuesa, donde pasarán unas vacaciones que les cambiarán la vida.
Jaime es el protagonista y narrador omnisciente del verano que le ayudó a dejar su niñez, le abrió los ojos al mundo de los adultos y le descubrió que la realidad no era ni blanca ni negra, sino más bien una amplia gama de grises que pendulan hacia lo claro o lo oscuro según el cristal con que se miren. Jaime es hijo de José María Olalla, médico del pueblo y pilar importante de su comunidad junto al alcalde-farmacéutico, Rodolfo Sangüesa (padre de Moi). Jaime es un joven sensible e intuitivo que, como todos, solo quiere encontrar su lugar en el mundo y, durante este verano, ese lugar será la librería de Michelle.
Michelle es una joven y bella francesa, hija y nieta de emigrantes vecinos del pueblo que se fueron a Francia a construir otra vida. Michelle llega en su furgoneta de color verde, una Volkswagen Samba con matrícula francesa (este vehículo será un protagonista más de aquel verano de 1977); porta como equipaje una biblioteca entera (en la que los autores franceses prevalecen aunque convivan con otros) que quiere vender en la taberna de sus abuelos, ahora convertida en librería.
¿Qué hace una furgoneta cargada de libros (mayormente) franceses en un pueblo soriano de 1977, cuya mayoría de habitantes no habla francés? Aunque esto pueda parecernos a priori un tanto marciano, si se piensas un poco no lo es tanto. Aquel año se celebraron en España las primeras elecciones democráticas, y queriéndolos unos y no queriéndolos otros, se produjo un cambio de paradigma social y político que trajo nuevos aires aires y un nuevo rumbo. Todo esto se ve representado de alguna manera en esa maravillosa bibliofurgoneta cargada de autores que antes no hubieran tenido cabida, como fue el caso de mi bienamado Antonio Machado.
Con un lenguaje claro y sencillo, Verónica Fernández construye un retrato social y político de Vinuesa (Soria) en 1977, cuando los cambios llegaron para quedarse, a través de la mirada de un adolescente de diecisiete años que impresiona por los muchos libros que ha leído pero que, como casi todos a su edad, no conoce las verdaderas caras de aquellos que conforman su círculo vital y social: solo ve lo que otros quieren que vea, y gracias a este despertar adulto y mediante la observación de la realidad se desprenderá para siempre de la inocencia inherente a su niñez.
Al cabo de los años, Jaime Olalla recuerda con una pátina nostálgica cómo transcurrió aquel maravilloso verano entre cuentos de Jean-Paul Laforet, misteriosos acontecimientos, fiestas desbordadas, manifestaciones y correteos en pandilla. Aquel fue un periodo en el que Vinuesa se llenó de personas de diferente clase y condición que, al igual que le ocurrió a nuestro joven protagonista, quedaron atrapados como polillas en la luz que desprendía La librería de Michelle.
Una novela en cuya sencillez está su grandeza.
Verónica Fernández (Vinuesa, Soria,1971) es licenciada en Filología Hispánica por la Universidad Complutense de Madrid y graduada en Guion por la ECAM (Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de la Comunidad de Madrid). Ha desarrollado su actividad profesional como guionista de cine y de televisión, participando en numerosos proyectos a lo largo de veinte años. Su pasión por la escritura se extiende también al campo teatral y a la narrativa.
Hola,
ResponderEliminarno conocía la novela y tampoco a la autora y me gusta lo que dices así que la tendré en cuenta como futura lectura.
Un beso
Hola. Pues la verdad es que no me llama la atención. Me parece una historia bonita sin más. Y con mucho tópico.
ResponderEliminarBesos
Siempre viene bien una historia sencilla y, además, cargada de libros.
ResponderEliminarTomo nota ^^
No acaba de llamarme la atención así es que no me lo llevo.
ResponderEliminarBesos
La verdad es que tiene su encanto y me llama la atención... pero no sé si este año tendré tiempo para hacerle un hueco, aún así me lo apunto.
ResponderEliminarUn besazo
Buena pinta tiene, yo diría que inmejorable, pero ya sabéis que este año ando en otras cuitas 😁😁😁
ResponderEliminarBesitos 💋💋💋
La temática suele hacerme disfrutar y leer sin parar, no conocía el libro pero pinta bastante interesante.
ResponderEliminarBesos =)
No tiene mala pinta, si se cruza en mi camino no me importaria leerla. Besinos.
ResponderEliminarEsta vez no me animo, no pinta mal, pero necesito más o acabo estresada.
ResponderEliminarBesos.
Título y tema atractivo. Y el que la autora sea de la misma población donde se desarrolla la historia, supongo que habrá hecho que todo sea más real.
ResponderEliminarUn abrazo
Me llamó la atención cuando salió, pero por unas cosas y otras la deje pasar. No me importaría leerla.
ResponderEliminarBesos
Bonito título pero parece que poco más hay. No sé, no termino de verlo. Besos
ResponderEliminarNo me atrae mucho, la dejo pasar esta vez.
ResponderEliminarUn beso ; )
Por el argumento (ese recuerdo nostálgico de un época, de juventud llena de cambios, esa transición de niño a adulto), me recuerda mucho a "Edad prohibida".
ResponderEliminarUn beso ;)